ENRIQUE ROCHA

De "Serafín" a "RBD": Enrique Rocha y las telenovelas que enamoraron a México

El actor falleció la tarde de este domingo, dejando detrás un legado prominente de éxitos en la pantalla chica

ESPECTÁCULOS

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Enrique Rocha se caracterizó como uno de los grandes villanos de las telenovelas (Foto: Especial)

Hablar de Enrique Rocha Ruiz es reconocer a uno de los actores más destacados en el ámbito de la farándula, su trabajo en el medio artístico inició en el teatro, de ahí pasó al cine y a la par en el radio, donde fue reconocido como la voz de Radio UNAM, sin embargo, el sitio en el que marcó huella fue dentro de las telenovelas.

Rocha es uno de los villanos más reconocidos y emblemáticos de la televisión, su figura altiva y una voz que estrujaba el corazón, le dieron la posibilidad de atrapar varios papeles como villano, sin embargo, su capacidad histriónica también le dieron la opción de interpretar otro tipo de personajes de los cuáles dejaron huella entre el público mexicano y de otras latitudes.

Enrique Rocha inició su carrera en las telenovelas en el año 1965 con la transmisión de ‘La mentira’ (si, la misma que décadas después estelarizó  Kate del Castillo), en aquella primera aparición tuvo bajo su responsabilidad encarnar el personaje de Johnny, de ahí damos el salto hasta 1974, año en que le dio vida al ‘Tío Leopoldo’, un personaje entrañable en la exitosa telenovela infantil ‘Mundo de Juguete’ junto con Graciela Mauri y Doña Sara García.

En 1983 le dio vida a Álvaro, un hombre casado del cual estaba enamorado la protagonista de ‘Cuando los hijos se van’, Francisca, (Saby Kamalich), en esta telenovela, Rocha se comporta como un marido ejemplar como fachada, pero la realidad es que engaña a Francisca y ella no se ve correspondida.

Tiempo después, entre 1985 y 1990, Rocha encarnó a personajes emblemáticos de la televisión y que son reconocidos aún en la actualidad; primero con un papel protagónico junto con Nuria Bages, en el melodrama producido por Eugenio Cobo, titulado ‘Cómo duele callar’.

En 1988 se ‘topó’ en el set de televisión con Claudia Islas, Diana y Carlos Bracho y el debut en telenovelas de la ‘Chica dorada’, Paulina Rubio en ‘Pasión y Poder’, para no variar su papel fue un personaje profundo y con toques de villano.

En 1990 le llegó la oportunidad de trabajar con el ‘Señor Telenovela’, Ernesto Alonso, con la telenovela, ‘Yo compro esa mujer’, estelarizada por una joven actriz, pero muy carismática llamada Leticia Calderón y el galán Eduardo Yáñez, melodrama basado en la historia de Alejandro DumasEl Conde de Montecristo’, por esa actuación en la que interpretó al villano Rodrigo Montes de Oca, le valió ganar el premio TvyNovelas en la categoría de mejor villano.

El despegue como villano emblemático

En 1993 llegó un parteaguas en la carrera de Rocha, y no sólo la de él, sino de todo el elenco que participó en ‘Dos mujeres un camino’, telenovela muy exitosa que recibió el apoyo del público desde que comenzó sus transmisiones, en esa historia le dio vida a Ismael Montegarza, el villano de la historia protagonizada por Laura León, Biby Gaytán y Erik Estrada. En la historia Ismael tiene como hijos a Luz María Jerez y Rodrigo Vidal, un verdadero éxito en la televisión.

Y de pronto le llegó un papel a la medida, encarnando al Virrey Félix María Calleja, en el relato histórico sobre la Independencia de México y producida de nueva cuenta por Ernesto Alonso. Unos meses después, Rocha fortaleció al elenco de ‘Pueblo Chico, Infierno Grande’, telenovela que contó con las participaciones de Verónica Castro, Juan Soler y una villana de época, Alma Delfina.

Entre 1997 y 1999, Enrique Rocha antagonizó una tripleta de telenovelas que forman parte de la cultura popular mexicana, primero con ‘Mi pequeña traviesa’ (Te quiero tanto, tanto, tanto, tanto, tantooo) con la jovencita Michelle Vieth, después un clásico de la televisión mexicana de la mano de Carla Estrada ‘El privilegio de amar’ con un elenco encabezado por Adela Noriega, René Strickler, Helena Rojo y Andrés García, que le valió obtener el premio TVyNovelas como mejor antor antagónico.

Después vino ‘Serafín’, telenovela protagonizada por Maribel Guardia, Eduardo Santamarina y un pequeño pero simpático Jordi Landeta, además de ‘Serafín, un angelito animado en televisión que tiene que luchar en contra de un enviado del diablo, nada menos que Rocha en su papel de Lucio Fernández, con el que otra vez, consiguió un galardón, el Premio Bravo como mejor caracterización como villano.

Para 2004, el actor le dio vida nuevamente a un personaje antagónico, León Bustamante, padre de Diego Bustamante (Christopher von Uckermann), y pareja de una invitada recurrente a lo largo de la historia, pero no como figura principal, la actriz Cynthia Copelli, por esta telenovela Enrique no recibió nominación alguna, pero como siempre, llamó mucho la atención como personaje principal dentro de la trama, en la que por supuesto destacaron las figuras jóvenes como Anahí, Dulce María, Alfonso Herrera, Maite Perroni y Christian Chávez.

Finalmente, en 2009 participó en un remake más de ‘Corazón Salvaje’, ahora con Aracely Arámbula y Eduardo Yáñez, en el papel de Rodrigo Montes de Oca. Mientras que en 2013, le dio vida a Aníbal Balvanera en el remake de la exitosa telenovela, ‘Amor en custodia’, que tuvo un mayor éxito en su versión hecha por Tv Azteca.

Su última aparición en un melodrama fue dentro de la telenovela, ‘Me declaro culpable’, en el que interpretó otro papel antagónico como Mauro Monroy Lacherade.

Larga vida en el recuerdo del público es la que le espera al actor de la voz fuerte y mirada altiva, hasta siempre al maestro Enrique Rocha Ruiz.

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