Científicos de la Universidad Tecnológica de Nanyang en Singapur desarrollaron un sistema que promete hacer sentir dolor a los robots, sí, leíste bien. Este sistema está hecho de moléculas de gel de iones y está inspirado en el cerebro humano.
El equipo de científicos agregó inteligencia artificial (IA) a una red de nodos sensores conectados a múltiples unidades de procesamiento, que fungen como "mini cerebros" distribuidos a lo largo de la "piel" del robot, lo que genera sensaciones de dolor a los robots. Todo esto sucede sin la necesidad de que un humano intervenga en el proceso. La investigación fue publicada en la revista Nature.
¿Por qué hacer sentir dolor a un robot?
Los especialistas predicen que la próxima generación de robots trabajará muy de cerca con los humanos, por lo que la percepción táctil y sensorial es fundamental para gestionar el contacto físico y la sensibilidad de los robots.
Afetto, el robot que siente dolor
Affetto, que así es como se llama el robot, tiene un potencial muy grande. Minoru Asada, un ingeniero de la Universidad de Osaka en Japón, y sus colegas lo concibieron solo como una cabeza hace unos años, pero ahora lo han dotado de un cuerpo completo y le han añadido, como si fuera una piel, sensores táctiles que recogen de forma fiable una amplia gama de toques, ya sea un toque ligero o un golpe duro. Este "sistema nervioso del dolor" artificial fue conectado al robot y este fue capaz de reaccionar a las sensaciones, usando una variedad de expresiones faciales.
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El objetivo es hacer más realistas a los robots "sociales", que son capaces de tener una interacción más profunda con los seres humanos. Esto, a pesar de sonar como ciencia ficción, está más cerca de lo que pensamos. Japón ya ha desplegado robots en residencias de ancianos, oficinas y escuelas como una manera de ayudar a su población envejecida y paliar la reducción de la fuerza de trabajo.