TRANSPARENCIA 3.0

Peligro colectivo, por préstamos

Entidades no financieras, sin registro, ni supervisión de la Condusef, violan cualquier política de datos personales y normas de privacidad

OPINIÓN

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Naldy Rodríguez / Transparencia 3.0 / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Los préstamos en línea, sin filas, ni intermediarios, están a la orden del día. Son rápidos, con pocos trámites, sin revisar el buró de crédito, ni pedir referencias o un aval. Tampoco hay anticipos, ni objetos o prendas empeñadas.

Los mensajes bombardean en redes sociales como Facebook y pueden resultar atractivos, sobre todo si tienes una urgencia, un problema familiar o doméstico, de esos que sólo se arreglan con dinero en efectivo. 

Es cierto. No empeñas computadoras, alhajas o electrodomésticos. Lo que empeñas es tu privacidad y hasta tu probidad. Y no sólo la tuya, sino la de todas las personas que conozcas y que tengas en la agenda de contactos de tu celular. 

Para esos préstamos rápidos sólo necesitas entregar virtualmente: CURP, credencial del INE, correo electrónico (si no tienes uno propio, puedes usar el de algún conocido) y, por supuesto, un teléfono móvil. Todo el registro se hace mediante una plataforma o un link, en el que solicitan ciertos accesos a información que almacena el dispositivo. 

Quién o quiénes están detrás de esas “empresas”, o cuentas de Facebook, donde ingresas algunos datos personales, das un clic en la “autorización” para acceder a tu celular y listo, están dentro de la esfera más íntima y personal, violando cualquier política y norma de privacidad. Por supuesto, son entidades no financieras, sin registro, ni supervisión de la Condusef.

Se han documentado cada vez más casos de extorsiones por estos préstamos en línea. No sólo la deuda e intereses crecen exponencialmente, también eres víctima del robo y uso indebido de tus datos y el de toda tu comunidad virtual. 

A los contactos, les llegan mensajes de números desconocidos con el nombre completo de la supuesta persona que recibió el préstamo, una foto de su rostro o selfie y la advertencia de que continuarán asediando si el supuesto deudor no paga. No importa el monto del adeudo, se sigue el mismo mecanismo: el acoso, la amenaza y la extorsión a ti y a tus contactos. 

Al tratarse de un hecho que se comete en el ámbito virtual, las intervenciones que se han dado son de las áreas de seguridad digital o policía cibernética de cada entidad; sin embargo, no se denuncia la violación de datos personales y la vulneración del derecho a la privacidad. 

Las aplicaciones de préstamos no están reguladas, pero desde 2010 está vigente una normatividad de observancia general que tiene la finalidad de regular el tratamiento legítimo, controlado e informado de los datos personales, para garantizar la privacidad y el derecho a la autodeterminación informativa de las personas. 

Dicha ley sí prevé los mismos principios que deben garantizar las instituciones públicas como licitud, proporcionalidad, lealtad y el consentimiento. También considera multas y hasta prisión para quien alcance un lucro indebido con el tratamiento de los datos personales. Hagamos valer la ley federal de datos personales en posesión de particulares y vinculemos a las autoridades competentes.

POR NALDY RODRÍGUEZ
COMISIONADA PRESIDENTA DEL INSTITUTO VERACRUZANO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN Y PROTECCIÓN DE DATOS PERSONALES
TRANSPARENCIA3.0@HOTMAIL.COM
@YDLAN

PAL
 

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