Patria no es la única vacuna contra el COVID-19 desarrollada en México, existen otros tres proyectos de antígenos que realizan instituciones educativas nacionales y laboratorios privados que están listos para iniciar la Fase 1 de estudios clínicos.
Las vacunas “UNAM/AP-rP9”, “NG19M” y la “Plataforma para el Desarrollo de Vacunas Virales” ya fueron presentadas a los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
En el desarrollo de “UNAM/AP-rP9” participan Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, Alpharma, Laboratorio Nacional de Citometría de Flujo UNAM, Cinvestav, Instituto Nacional de Medicina Genómica, InDRE, UNIPREC, Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia-UNAM, UDIBI, INER, Instituto Nacional de Cancerología y la Sedena.
Utiliza “proteína recombinante” y es de dos dosis separadas por 14 días, actualmente se encuentra lista para arrancar Fase 1 de estudios clínicos y se está preparando la documentación para hacerla llegar a Cofepris.
Te podría interesar
Su producción requiere poca inversión, y “es segura y flexible, además de que permite gran escalabilidad y es completamente mexicana.
En “NG19M” participan Cinvestav, IMSS, Silanes, Merck, UPEAL, LEI, Aptar Pharma y Newton Fund.
Desarrollada a partir de genes sintéticos y utiliza una proteína recombinante, es de dos dosis separadas por 21 días. Utiliza métodos autorizados por instancias reguladoras en desarrollo de vacunas, y ya cuenta con autorización para producción.
Se encuentra terminando la fase preclínica, iniciando el escalamiento y la Fase 1 de ensayos clínicos, y se está preparando la documentación para hacerla llegar a Cofepris, así como la documentación para solicitar patente.
Y la “Plataforma para el Desarrollo de Vacunas Virales” es útil para el SARS-CoV-2 y otros padecimientos frecuentes en la región como zika y dengue.
En ella trabajan la UNAM, IMSS, Tec de Monterrey, Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, Laboratorio Nacional para la Producción y Análisis de Moléculas y Medicamentos Biotecnológicos, UNIPREC y Laboratorios Liomont.
POR PARIS SALAZAR
MAAZ