El Congreso de la Ciudad de México aprobó la Ley de Salud en la que se permitirá a las mujeres interrumpir legalmente su embarazo, antes de las 20 semanas de gestación. Esto en el caso de que hayan sido víctima de violación.
En el cambio a la legislación queda establecido que los médicos de los hospitales estarán obligados a practicar la suspensión del embarazo, en el caso de que la mujer afirme que fue víctima de violación. Además, bastará su declaración para que se realice el proceso y no será necesario que haya presentado una denuncia formal ante las autoridades competentes.
Esta discusión de la ley provocó un enfrentamiento significativo entre las bancadas. Algunos legisladores aseguran que la reforma garantiza que las mujeres que sufrieron violación pueda abortar, pero en otros casos, piensan que la reforma pone en riesgo la salud de la mujer.
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Podría reducir las denuncias por violación
Aunque esta reforma garantiza el derecho a las mujeres que sufrieron violación, a terminar con el embarazo, también se ha dicho que las opiniones contrarias no son porque se dude del testimonio de la víctima, sino porque se permite que el culpable quede impune.
En este caso, la bancada opositora dijo que se inhibiría la cultura de la denuncia, en lugar de fomentarla y así terminar con la cifra tan alta de delitos sexuales en la capital. Los legisladores dijeron que en su lugar, es necesario apoyar a las mujeres de manera integral y ayudarles a que denuncien.
En la Ciudad de México, el aborto es legal desde el año 2007, pero la legislación contemplaba la interrupción del embarazo sólo durante las primeras 12 semanas del proceso.
gka