El Gyrotonic se ha presentado como una nueva forma de ejercitarse. Aunque se ha popularizado en los últimos meses, tiene sus raíces en la década de los ochenta, cuando el bailarín profesional Juliu Horvath lo creó para tratar una lesión grave, ya que mezcla elementos del yoga, la meditación y el profundo conocimiento del movimiento corporal.
Distinguido por su enfoque holístico, el Gyrotonic propone un enfoque dinámico que integra giros, espirales y extensiones coordinadas con la respiración, para fomentar una mayor movilidad y flexibilidad, además de que tiene beneficios cardiovasculares, de fuerza y una notable mejora en la movilidad general.
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¿Es caro practicar el Gyrotonic?
Contrariamente a la intimidante perfección que a menudo se asocia con sus practicantes, el Gyrotonic es un sistema accesible y además se puede practicar en todas las edades. Su creciente popularidad en centros de rehabilitación y entre profesionales de la salud se debe a su eficacia en la mejora de la condición física general y en la recuperación de lesiones.
El sistema Gyrotonic depende de un conjunto de equipos especializados, diseñados para apoyar y guiar el cuerpo a través de movimientos que reflejan las espirales y curvas naturales del mismo. Hay una torre de poleas, por ejemplo, permite una personalización del entrenamiento, adaptándose a las necesidades individuales y fomentando un movimiento libre y expansivo.
¿Por qué deberías practicar el Gyrotonic?
Este enfoque único no solo busca corregir desequilibrios musculares y esqueléticos sino también mejorar la eficiencia del movimiento a través de una tensión continua y una coordinación rítmica con la respiración. En la actualidad aún no es tan popular en México, por lo que podrías batallar para encontrar un lugar donde practicarlo.
Eso sí, los testimonios de quienes lo practican hablan de sus amplios beneficios, que incluyen una mayor movilidad de la columna vertebral, una mejor postura, una mayor conciencia corporal y una notable mejora en la función respiratoria y circulación. Aunque la investigación científica aún lo evalúa, hay algunos estudios que apuntan a que tiene potencial para aliviar condiciones específicas como la escoliosis y el dolor lumbar crónico.