Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 se convirtieron en un caso especial en la historia de esta competición, ya que está marcado por el Covid-19 y la nueva normalidad, misma que indica que no se le puede permitir el acceso a muchos aficionados, el uso de mascarillas entre muchas otras; pero esto hará que la derrama económica no sea la misma que en otras ediciones de la justa olímpica.
Con la aparición de la variante Delta, los organizadores de los JJOO determinaron recudir el acceso a los fanáticos de todo el mundo a Japón y de paso esto significó que Tokio y el Comité Olímpico Internacional (COI) tendrán una perdida económica importante.
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Los Juegos Olímpicos están cada vez más cerca, por lo que las autoridades tuvieron que avisar de las nuevas reglas para poder ingresar a Tokio, pero lo más importante la cantidad de aficionados permitidos por cada país para poder disfrutar de esta justa olímpica.
Según un estudio realizado por Fitch Ratings, revelado por Sportico se confirmó que el COI y Tokio 2020 tendrán una gran perdida por las nuevas medidas de seguridad, misma que no se acerca a la que tendrían si cancelan el evento.
En el estudio se confirmó las reaseguradoras deberán regresar hasta 400 millones de dólares en pagos para los fans que tuvieron que cancelar los planes para ir a las Olimpiadas. Este dinero será destinado a el reembolso de boletos y hospitalitys.
Una larga travesía
En el verano 2020 se habló de cancelar la justa, con lo que la capital japonesa y el COI perderían cerca de 4 mil millones de dólares, por lo que se determinó postergar las Olimpiadas para este verano, donde se esperaba poder tener más controlada la pandemia; esta situación se vio afectada con la llegada de la variante Delta.
Tokio 2020 comenzará en 10 días, por lo que las distintas naciones comenzarán a mandar a sus atletas para comenzar los protocolos de seguridad y sanidad. En este tiempo también estarán llegando los medios de comunicación, así como los pocos aficionados a los que se les permitirá el acceso al país.