El debate presidencial del pasado domingo demostró nuevamente que existen fundamentalmente dos proyectos de Nación que competirán en 2024.
Por un lado, la corrupción que defiende la candidatura del PRIAN y sus cómplices, recientemente destacados por los escándalos del cártel inmobiliario. Por otro, la Transformación que se puede profundizar con la Doctora Claudia Sheinbaum Pardo.
Los contrastes han sido cada vez más evidentes. Conforme avanza la campaña por el 2 de junio, la candidata de la corrupción muestra cada vez más su verdadero talante y su poca altura política.
El domingo del debate, Gálvez se limitó a insultar a la Dra. Claudia Sheinbaum. No vimos ni una sola vez una propuesta viable o inteligente del lado del PRI-PAN-PRD. La favorita de las redes sociales fue, me parece, cuando propuso almacenar agua en Texcoco, territorio donde eso es imposible debido a la salinidad.
Por otro lado, la Dra. Claudia Sheinbaum tomó el tiempo que tuvo para proponer. Solamente en unos segundos despachó las infamias de Gálvez, y mostró altura de miras y de personalidad política.
Las y los mexicanos tienen cada vez más claro no solamente el perfil sino lo más importante: el proyecto de cada una de las opciones electorales. Los contrastes a la luz del público son evidentes, la victoria como indican todas las encuestas pertenece nuevamente al movimiento de la regeneración nacional.
Las campañas de guerra sucia en contra de nuestro movimiento no han surtido efecto ello gracias a dos fenómenos paralelos. Primero, la alta calidad de la persona pública y el proyecto de gobierno de la Doctora Claudia Sheinbaum; y segundo, el ferviente deseo del pueblo de México para darle continuidad al proceso iniciado por el presidente López Obrador.
En conclusión, el debate presidencial del domingo pasado delineó claramente dos visiones contrapuestas para el futuro de México. Mientras que el PRIAN y sus aliados representan la corrupción y los intereses oscuros, la opción encabezada por la Doctora Claudia Sheinbaum Pardo promueve una genuina transformación y un gobierno comprometido con el pueblo.
Las propuestas vacías y los ataques desesperados del lado de la corrupción contrastan fuertemente con la solidez y la visión de futuro presentadas por la Dra. Sheinbaum.
POR JOSÉ NARRO CÉSPEDES
COLABORADOR
@NARROJOSE
MAAZ