En ocasiones es bueno sustraerse desde los adentros de un deporte mismo y tratar de verlo con otra óptica…
Cosa de revisar de repente un medio especializado en el deporte como industria / negocio (FOS) y de repente podemos darnos cuenta de que al beisbol le está costando trabajo estar entre los titulares peleándole a todos los otros major sports (NFL, NBA principalmente) y bueno es incluso ante el fenómeno de esta tremenda atleta Caitlin Clark en el basquetbol desde lo colegial ahora a lo profesional.
Por ahí se ha comentado mucho de su la empresa de la manzanita tiene interés en comprar más y más del beisbol, de si engullir a la Fórmula 1 y ahora se especula quizá nada lejanamente- si están queriendo los de Cupertino, California, quedarse ya con los derechos de una competencia “planetaria” tan conocida como el Mundial de futbol soccer.
Y aquí estamos los beisboleros, con la temporada en curso se supone que debería estar todo el hype de si Chuchito o Pepito batearon el ciclo, los múltiples cuadrangulares, las noticias de si esto o aquello se supone son una piedra angular para la presencia mediática.
Ejemplos sobran: la expulsión del manager Aaron Boone de los Yankees de Nueva York, cuando el ampáyer principal confunde un grito de insultos por parte de un aficionado, mismo equipo donde también abuchearon al ídolo Aaron Boone y no es para menos si perdieron por blanqueada ante los aparentemente inferiores Atléticos de Oakland.
Por ahí la tremenda pieza de Tanner Houck con economía procesal desde la lomita; el ver de regreso al casi legendario Justin Verlander, o; los tumbos que están pasando los Dodgers de Los Ángeles como supuestos favoritos de la Liga Nacional.
Abundando en el equipo recién mencionado, evidentemente la trama de Shohei Ohtani con la acusación sobre su ex-traductor-ya-no-amigo la cual está terminando en un escándalo tapado tampoco está haciendo reflectores.
Y es ahí donde quizá las mismas Grandes Ligas deban detenerse en el camino y pensar si el haber querido hacer todo en su haber para no afectar la estampa del astro japonés, está provocando a otros medios voltear a donde sí hay historias fulgurantes además de coberturas posibles.
Parece mal karma y hasta algo impensable con la expectativa antes de esta temporada con los Yankees y los Dodgers reforzadísimos, con los Orioles de Baltimore peligrosos y los Bravos de Atlanta con sed de venganza pero parece, quizá estemos en una perspectiva errada, que las noticias para los beisboleros se están quedando exclusivamente con nosotros los beisboleros…
Menudo esfuerzo pero, ¿qué se puede hacer?, ¿le haces como Liberty Media y comienzas a crear un ruido tremendo extra diamante? Sin duda a muchos aficionados de hueso colorado quizá les cause urticaria aunque estamos en la era de tik tok y necesitas a los jóvenes acercándose a tu espectáculo.
Fácilmente se pueden contar más de 15 historias en el mencionado Front Office Sports y hace falta beisbol, incluso, con la polémica o especulación de si se van a regular las reyertas, de si es cierto aquello de que quieren insertar un décimo fildeador (“short center”), ¡¡lo que sea!!
POR ALEJANDRO AGUERREBERE
COLABORADOR
PAL