El presidente de la COP28, Sultán Ahmed Al Jaber (Emiratos Árabes Unidos), reafirmaba el lunes que aspiraba a una caída de las emisiones de gases de efecto invernadero, pero que el destino preciso de los combustibles fósiles para lograr este objetivo aún estaba lejos de decidirse.
Esa y otras contradicciones de Al Jaber (como ser jefe de la COP28 y de la petrolera nacional Adnoc), no son, con todo, la única nota de la cumbre climática.
Todos los proyectos regionales externos a la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático, en Dubái, que incluyen una asociación con Israel están ahora en peligro de reducir su rango y de avanzar muy lentamente.
Uno de los impactos más notables ha sido el anuncio de Jordania, el 16 de noviembre, que renuncia a la firma del acuerdo con Israel de "agua por electricidad" que se debate desde hace un año y que iba a ser finalizado en la COP28.
Asimismo, las esperanzas de que los Acuerdos de Abraham abrirían el camino a la cooperación en proyectos relacionados con el medio ambiente entre Israel y los países firmantes (ambiciosos en términos de innovación y en intercambio de capacidades e investigación en ámbitos como desalinización del agua y eficiencia agrícola), han quedado suspendidas.
Por su parte, el primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció que los ataques israelíes con fósforo blanco en el sur de Líbano han causado daños irreversibles a más de cinco millones de metros cuadrados de bosques y tierras agrícolas, y dañado miles de olivos (de acuerdo con el Ministro libanés de Agricultura, serían 47 mil, incluidos algunos que tenían siglos de antigüedad).
El Ministro de Asuntos Exteriores egipcio llamó en la COP28 a guardar un minuto de silencio por "todos los civiles muertos en el conflicto de Gaza".
Desde el 7 de octubre, y hasta el martes 5 de diciembre, al menos 16 mil palestinos habían sido asesinados por Israel en Gaza por los bombardeos aéreos, de acuerdo con fuentes oficiales palestinas.
Aproximadamente, un millón y medio de personas han sido desplazadas en Gaza desde el inicio de la guerra entre Hamas e Israel, según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos; esta cifra representa más de 80% de la población del enclave asediado.
Asimismo, la ONU ha informado de varios ataques del Ejército israelí a escuelas de la UNRWA transformadas en refugios.
El martes, un ataque israelí a un colegio que alberga a palestinos desplazados por la guerra dejó al menos 25 muertos al sur de Gaza.
En Cisjordania, en un mes, al menos 244 palestinos han sido asesinados por el Ejército o los colonos israelíes, según la oficina de coordinación de asuntos humanitarios de la ONU. En Israel, la cifra oficial de muertos asciende a unos mil 200.
POR MARTA TAWIL
INVESTIGADORA DE EL COLMEX
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