LA ENCERRONA

Salvar la democracia

El ex presidente Donald Trump no solo es él, sino que ha sembrado la semilla antidemocrática del trumpismo en gran parte de la ciudadanía de EU

OPINIÓN

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Adriana Sarur / La Encerrona / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

“Con la democracia se come, se educa, se cura” - Raúl Alfonsín

Estamos a 12 días para la jornada de medio término en EU y lo que está en juego no es algo menor, se juega el valor de la democracia liberal. En este sentido, la llegada del “súper martes” 8 de noviembre ha generado una especie de espejo con reflexión a las presidenciales de 2024, pues existe un aura de enfrentamiento entre Joe Biden y el ex presidente Donald Trump, más allá de las contiendas locales, senatoriales y legislativas, y el enfrentamiento de partidos Republicano y Demócrata.

Durante toda la contienda, en estas midterm sigue instalado en el imaginario colectivo estadounidense la campaña presidencial de 2020 y, sobre todo, aquel 6 de enero de 2021, donde el asalto al Capitolio por parte de seguidores —fanáticos— de Trump, sacudieron no solo este edificio emblemático, sino también las raíces democráticas de nuestro país vecino. Al respecto, se percibe un ambiente bipolar, mientras los votantes republicanos pro Trump siguen pensando en unas elecciones “robadas”, a los demócratas les recuerda el porqué del sufragio a Biden.

En este sentido, 71 % de los estadounidenses cree que el futuro está en juego en las elecciones y piensa que “la democracia norteamericana está en peligro”, pero a su vez creen que no es el problema más severo, conforme al sondeo de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research. Del mismo modo, 28 % de los votantes registrados (41 por ciento de Republicanos), dijeron tener poca o nula confianza en las elecciones, según el estudio demoscópico realizado por el New York Times/Siena Poll.

Así, reflejan la erosión democrática, el riesgo grave que se corre al perder la confianza en los temas públicos, las instituciones y en la política misma. Si bien, no es un problema endémico, como hemos observado en países muy maduros democráticamente como los europeos, en el territorio americano existe la percepción de que “a nosotros nunca nos va a pasar”, pero sucede. Por supuesto que la economía es crucial para enfrentar una contienda electoral, mucho más en la mayor crisis inflacionaria en más de cuatro décadas, sin embargo no podemos perder de vista el peso y los factores políticos.

Es por esto que he insistido tanto en la gran responsabilidad que tenemos los ciudadanos al elegir a los gobernantes, no es desproporcionado decir que un fallido y oscuro liderazgo político puede echar por la borda todo el entramado institucional, democrático y político. Discursos de odio, polarizados, maniqueos solo sirven para restar la confianza de las sociedades en la política como palanca de beneficios sociales y a la democracia como su mejor régimen.

Trump no solo es él, ha sembrado la semilla antidemocrática del trumpismo en gran parte de la ciudadanía estadounidense, misma que aún no se ha dado cuenta de las repercusiones y fatalidades que puede acarrear si se llegase a concretar. Se trata de salvar a la democracia y a la política.

POR ADRIANA SARUR
ADRIANASARUR@HOTMAIL.COM
@ASARUR

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