Tras el paso del huracán "Beryl" en Quintana Roo, decenas de barcos y yates se resguardaron entre los manglares que coexisten en Cancún, esto con el objetivo de protegerse de los vientos avasalladores que se generaron y que actualmente se dirigen hacia la península de Yucatán.
En este sentido, en redes sociales circula imágenes de un capitán de un velero que hizo lo mismo que muchas embarcaciones, luego de la llegada de este fenómeno natural, protegiéndose del fuerte oleaje, la racha de vientos de más de 113 kilómetros por hora, y los daños que puedan ocasionar a sus navíos.
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El oficial en jefe de este velero de tamaño mediano, muestra además, de la lluvia, algunos pequeños botes, lanchas y yates, refugiándose entre los manglares, quien destaca las fuertes rachas de vientos.
"Ahora sí están una rachas muy fuertes", se escucha al capital del velero.
Al respecto, mencionó que han sorteado de este forma otros huracanes en el pasado, como el huracán "Wilma" ocurrido en 2005, el cual fue de categoría 5. Asimismo, se dijo agradecido con la naturaleza y pidió seguir respetándola, pues señaló que para combatirla "se necesita la misma naturaleza, en este caso, los manglares".
¿Por qué las embarcaciones usaron los manglares?
Los capitanes de cada navío utilizaron estos manglares como una barrera para los huracanes, siendo un buen método para proteger zonas y evitar destrucciones en las que puedan perder el barco por completo en caso de que impacte uno con otro.
El capitán explica que las ráfagas de vientos pasan por encima de los manglares y los botes casi quedan inmutados en el agua, comparado con la zonas hoteleras que están a varios metros de donde se refugian
DRV