Colectivos de pacientes con VIH e integrantes de la comunidad LGBTIQ+ se han manifestado la tarde de este viernes 1 de diciembre por el desabasto de medicamentos y la obtención de atención médica de calidad en la capital. Los manifestantes han mostrado su desesperación quemando la entrada principal de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, ubicada en la zona de Polanco, sobre la calle de Homero.
El inmueble gubernamental de la alcaldía Miguel Hidalgo ha sido evacuado por motivos de seguridad, hasta el momento no se tienen reportes de personas heridas. Se espera que en los próximos momentos arriben personal del Cuerpo de Bomberos de la CDMX para sofocar las llamas que están consumiendo algunos muebles y mantas.
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En la zona se encuentran elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), quienes únicamente se han dedicado a custodiar la manifestación, no se reportan saldo de detenidos o aprehendidos por las acciones. Los colectivos piden un diálogo con las autoridades.
Aumentan casos de VIH en la CDMX
De acuerdo con información de la Secretaría de Salud, en su apartado de datos abiertos, los reportes de casos positivos atendidos por Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) en la Ciudad de México pasaron de 643 en 2020 a dos mil 882 en 2022. Incluso durante la pandemia de COVID-19, la dependencia de salud detalló que únicamente se registraron 643 casos por este virus en todas las dependencias médicas.
Reportes de la Dirección de Epidemiología y Medicina Preventiva han han arrojado las cifras de pacientes con el virus por género, teniendo a 2022 como el año con más pacientes infectados hombres con 2 mil 596 y hasta el momento, de enero a noviembre del presente año, se tienen mil 391 casos positivos.
La discriminación aumenta el miedo al VIH y con ello la vulnerabilidad a la infección, y obstaculiza detectarla y tratarla oportunamente. La discriminación favorece el autoestigma y dificulta que las personas se perciban como sujetos de derechos.
Cuáles son las prácticas de alto riesgo
Las prácticas de riesgo son aquellas en las que existe intercambio de fluidos (sangre, semen, fluidos vaginales). El cuidado de la sexualidad nos corresponde de manera personal y no debemos dejarlo en manos de terceras personas. Las personas que viven con VIH tienen derecho a la práctica sexual.
La protección y la promoción de los derechos humanos previenen el estigma y la discriminación contra las personas que viven o están en riesgo frente al VIH y al sida por lo que reducen la vulnerabilidad a la epidemia.