La felicidad es una de las emociones o estados más buscados por las personas, pues las personas suelen hacer hasta lo imposible por sentir algo de esa “felicidad”, una emoción que todos tenemos e incluso llegamos a olvidar que es tan sencillo obtenerla, por lo que si eres de esos que necesitan como recordar tener esa emoción quédate por qué tenemos la respuesta.
Freud alguna vez mencionó que la felicidad era “el resultado de satisfacer necesidades acumuladas que han alcanzado un nivel elevado de tensión”, le creas o no al señor Freud, este tenía mucha razón por lo que si quieres obtener la felicidad o al menos volver a sentirla, te dejamos estos hábitos que te acercaran más a ella.
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Aceptar tus emociones
Hay un estudio de la National Library of Medicine que ejemplifica, el etiquetado de sentimientos como un “animador” de nuestro cerebro, esto quiere decir que quienes hablen, escriban o compartir de alguna actividad para aceptar sus emociones serán más felices, pues además podemos ser mejores distanciadores de problemas y gestionarlos mejor.
Amigos por doquier
La socialización es clave en el ser humano, no es poco con que esta se encuentra en la Pirámide de Maslow, sino que al hacerlo las personas son más felices con sus vínculos. Así lo demostró un estudio de Harvard, que menciona que el denominador común de las personas más felices son aquellas que tienen amigos, pues tienen objetivos y son físicamente más saludables.
GymRat
Es bien sabido que el ejercicio es uno de los favoritos de la felicidad, pues nos da un increíble nivel alto de vida, por lo que un estudio de Oxford y Yale demostró que practicar ejercicio proporciona más felicidad que ser rico. Pues aseguraron tener un 42% menos días tristes en su vida, todo gracias a correr un rato.
Apapachos
El cariño físico es uno de los mejores hábitos que te pueden hacer feliz, no es por nada, pero el claro ejemplo es tu lomito, si lo abrazas es feliz y tú también. Un artículo de la revista PLOS ONE, reveló que recibir o dar abrazos sirve para atenuar la tristeza y resolución de conflictos, ejemplificando que desde bebés ya estamos pidiendo uno para garantizar sobrevivir.
Tu propio fan
El más importante de todos, el amor propio. Y es que además de pensar en relaciones con otro y quizá de otras personas, primero debes ver por ti mismo. “Hay que querernos bonito para querer bonito”. Un estudio de la Universidad de Michigan, dirigido por Ethan Kross, expuso que cuando no nos establecemos en primera persona, solemos ser malos con nosotros, pero que si lo hacemos en segunda persona eso no pasa, por ello habla contigo mismo y di “lo estás haciendo genial”.