Las patas de elefante son una de las plantas más usadas en interiores, tanto de casa como de oficina, pues su gran tamaño pero finas hojas la hacen elegante para decorar cualquier sitio.
Este tipo de plantas tienen la particular característica de tener un tallo en forma de gota, que después crece de forma alargada y termina en varias plantas alargadas de color verde, que requiere ciertos cuidados, sobre todo al momento de transplantar.
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Debido a que las patas de elefante crecen en ambientes húmedos, propios de México y algunos de Guatemala, principalmente, por lo que requiere cuidados específicos para propiciar su correcto desarrollo.
Una de las principales características es que es preferible tenerla en lugares interiores pero con una correcta iluminación natural, por lo que es aconsejable que reciba al menos unas dos horas de luz solar, para propiciar su crecimiento sin que llegue a quemar sus hojas.
Además, respecto al riego, debido a la forma bultosa de su tallo, que es donde suele conservar el agua para después distribuirla, no requiere un riego constante, por lo que deberás proporcionarle agua cada dos o tres semanas, dependiendo del ambiente en que se encuentre.
¿Cómo trasplantar la pata de elefante?
Debido a que es una planta de tipo selvático y se desarrolla en ambientes húmedos, esta planta llega a alcanzar alturas muy grandes, las cuales pueden llegar hasta los 10 metros si se encuentra en su forma silvestre.
Sin embargo, en maceta puede llegar a crecer aproximadamente metro y medio o hasta dos, dependiendo del tamaño del recipiente que lo contenga, por ello, en ciertas ocasiones es necesario su cambio para propiciar su crecimiento y que no llegue a perecer.
Por lo anterior es necesario tener ciertos cuidados al momento de cambiar nuestra pata de elefante a otra maceta o incluso a un jardín.
La mejor manera de hacerlo es que si lo haces en maceta o jardín es cavar un hoyo profundo que sea al menos del doble de tamaño del cepellón o base del tallo de la pata de elefante. Considera que una opción adicional es considerar colocar algún tipo de sustrato para plantas en la tierra en donde vas a poner la pata de elefante.
Antes de colocar tu planta verifica que sus raíces no estén podridas, si es así, recorta con un corte diagonal las que se encuentran mal y después coloca tu pata de elefante en la tierra cuidando que el cepellón quede ligeramente por encima de la tierra.
Cube bien lo demás y humedece ligeramente la tierra. Una vez que ya quede bien colocada, verifica también que las hojas tengan un color verde, pero si hay algunas amarillentas, es necesario podarlas con sumo cuidado para que no contaminen al resto de la planta.
dhfm