El cine siempre ha intentado plasmar, de alguna manera, la realidad en la que se encuentra la sociedad en ese momento de la vida, pero muchas veces hay películas que son relegadas al olvido debido a las temáticas que abordan y es que en el pasado han existido cintas que retratan situaciones complicadas, por lo que incluso son consideradas como "adelantadas a su época" y aunque en ese momento fueron silenciadas, años después han sido rescatadas para revalorarlas y hacerlas parte de la historia.
Este es el caso de la película Freaks (Fenómenos) que fue grabada en 1932 y que con el tiempo ha demostrado ser una verdadera obra de arte que tiene como personajes principales a hombres y mujeres que fueron tilados como "fenómenos" y la sociedad les dio la espalda a tal grado de exhibirlos como "atracciones" dentro de los circos, pero el hecho de que no eran actores sino personas que de verdad eran parte de esta segregación, lo que representa valiosos testimonios y el panorama del pensamiento general.
Fotografía: Captura de pantalla/ IMDb
La película más impactante sobre la vida en el circo
La icónica productora Metro Goldwyn Mayer, impulsada por el fenómeno de las películas de terror, decidió contratar al director de Drácula (1931), Tod Browning para dirigir la Freaks, en donde buscarían presentar "monstruos" o mejor dicho, a personas con malformaciones físicas y características únicas, sin ningún tipo de maquillaje para así contar como es la vida dentro del circo, sin ningún tipo de mentira, marcando así un hito en la historia del cine al dar un espacio para que estas personas pudieran expresarse de manera auténtica.
El rodaje de Freaks provocó un escándalo dentro del estudio ya que algunos miembros del equipo técnico de la Metro Goldwyn Mayer se negaban a interactuar con los actores debido a su apariencia, mientras que otros los menospreciaban con bromas hirientes, pero a pesar de esto, algunos actores comenzaron a adoptar actitudes caprichosas y ambiciosas, lo que añadió tensión al set.
Fotografía: Captura de pantalla/ IMDb
La trama de Freaks se desenvuelve en un "circo de fenómenos" que se encuentra bajo la dirección de Hans (Harry Earles), un hombre de baja estatura que hereda una considerable fortuna, y Cleopatra (Olga Baclanova), una trapecista seductora que urde un plan para apoderarse de su riqueza, pero cuando las mentiras de Cleopatra son descubiertas, los miembros freaks del circo se alzan en rebeldía contra ella.
La película ilumina la noción de "monstruosidad" humana, una dimensión que va más allá de las apariencias físicas ya que plantea que un "monstruo" es aquel que puede infligir daño sin importar las consecuencias, además, subraya un vínculo familiar arraigado en el circo, donde el daño a uno afecta a todos y es justo esta concepción lo que se manifiesta de manera impactante en una escena donde los freaks son humillados por Cleopatra.
Fotografía: Captura de pantalla/ IMDb
En esencia, Freaks invita al espectador a cuestionar quiénes son los auténticos monstruos: ¿los individuos únicos y marginados, o la sociedad que los excluye y maltrata? A pesar de las interpretaciones erróneas que prevalecieron en su época, la película continúa emitiendo su mensaje profundo y provocador, desafiando convenciones y resaltando la importancia de ir más allá de las apariencias superficiales.
Es por ello que, tras su estreno, la película recibió críticas negativas y fue censurada en todo Estados Unidos, siendo proyectada recién 30 años después en el Festival de Venecia, pero quienes tuvieron la oportunidad de verla en su momento salían horrorizados de las salas de cine, lo que con el tiempo le valió la leyenda de estar maldita, pero hoy en día Guillermo del Toro la ha catalogado como "legendaria, de culto y provocadora".
Fotografía: Captura de pantalla/ IMDb
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