El candidato al gobierno del estado por la coalición “Mejor rumbo para Puebla”, Eduardo Rivera Pérez, señaló que las agresiones que recibieron sus vecinas, madre e hija fue un ataque directo en su contra debido a que repitieron en diversas ocasiones que esperarían al “político para meterle un balazo en la cabeza”.
En conferencia de prensa, señaló que la declaración de ellas ya ha sido tomada por las autoridades de la Fiscalía General del Estado, pues ellas están siendo atendidas médicamente ya que presentan varios golpes en su rostro.
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Dijo que desde el 2 de mayo había advertido sobre los problemas de seguridad en el proceso electoral, “desgraciadamente ayer por la noche esa situación se materializó en un ataque en el lugar donde vivo y se dañó a madre e hijas que son ajenas al proceso”.
Agradeció el apoyo de los partidos políticos que integran la coalición, además de que en estos momentos está pendiente de las atenciones físicas y psicológicas de las agredidas.
Reiteró que su familia se encuentra físicamente bien, pero están siendo atendidos psicológicamente.
Demandó e hizo responsables de su seguridad tanto al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, como al gobernador del estado, Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
Dijo que “se trató de un atentado y no puede haber ni admito otra versión, por lo que hago un enérgico llamado a ambos para que cumplan con su obligación constitucional de garantizar las condiciones mínimas para la realización de un proceso electoral”.