El futbol americano es uno de los deportes de alto impacto que ha sido considerado como uno de los más "rudos" y peligrosos, pues además de los innumerables golpes que se han entre jugadores cada partido, también hay lesiones, que en ocasiones suelen ser sumamente fuertes, además hay varias conmociones que pueden causar grandes estragos en el funcionamiento del cerebro de los participantes.
En esta temporada 2024 de la NFL, una de las lesiones o conmociones cerebrales que han causado preocupación entre los fanáticos es la del quarterback, Tua Tagovailoa, quien desde la semana 2 de la NFL, en su encuentro contra los Buffalo Bills, la cual es la tercera en su paso por la liga y la quinta desde su carrera en el futbol americano colegial.
Pero, de acuerdo con datos de la NFL, los cuales se han registrado desde 2015, en esta pretemporada se ha registro un mínimo histórico de conmociones cerebrales, pues solo hubo 44 casos en partidos de práctica, lo cual implica una disminución de 24 por ciento con respecto al año anterior.
¿Por qué hay menos conmociones en la temporada 2024 de la NFL?
“El motivo de este cambio está ciertamente relacionado con las modificaciones en las reglas y en el equipamiento, incluido el "Gorro Guardián", así como una serie de esfuerzos adicionales que hemos hecho al paso de los años para abatir estos números", resaltó Jeff Millr, vicepresidente ejecutivo de la NFL, quien supervisa la salud y la seguridad de los jugadores.
La nueva regla sobre la patada de salida ha llevado a menos lesiones en general, pero se han presentado algunas conmociones cerebrales en esa jugada.
“Vimos un par de conmociones más en la patada dinámica de salida que el número que pronosticábamos”, reconoció Miller. “No hemos visto conmoción alguna en las primeras tres semanas de la patada dinámica de salida en la temporada regular”.
Casi 99 por ciento de los jugadores usaron cascos de alto desempeño, incluidos más de 250 jugadores que optaron por los modelos que, según la liga, proporcionan tanta o más protección que la de una variante convencional recubierta por el “Gorro Guardián”, hecho con un material acojinado.
Hubo una reducción de casi 50% en las conmociones cerebrales durante la pretemporada entre los jugadores que usaron el citado gorro durante sesiones en que ello era obligatorio en relación con el promedio observado cuando la decisión era voluntaria.
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