Con el peso de favorito para ganar el Mundial de Clubes, por quinta vez en su historia, Real Madrid cumplió con el trámite al vencer ayer 4-1 al Al-Ahly de Egipto, para medirse el sábado con el Al-Hilal de Arabia Saudita, en la final a celebrarse en Rabat, Marruecos.
El equipo merengue levantó el trofeo en cuatro de las últimas ocho ediciones, con lo cual es el máximo ganador del torneo.
Su oponente por el cetro es una escuadra árabe que sorprendió al dejar en el camino al Flamengo de Brasil, en semifinales.
“Hay que respetarlos, tienen cualidades individuales y un buen colectivo, estarán ilusionados por jugar la final, aunque nosotros también”, dijo el técnico Carlo Ancelotti, sobre su próximo rival.
De conseguir la corona, los merengues se quitan el mal sabor de boca en lo que va de 2023, luego de perder la final de la Supercopa de España ante el FC Barcelona, y estar a ocho puntos de diferencia de su acérrimo rival, que es primer sitio en La Liga.
Ayer, el Madrid encontró el 1-0, al minuto 42, por medio de Vinícius Júnior. Para el complemento, al 46’, Federico Valverde aumentó la ventaja.
Ali Maaloul descontó con un penalti (65’), y después de que Luka Modric falló un tiro desde los 11 pasos, Rodrygo (90+3’) y Sergio Arribas (90+8’) cerraron la victoria del cuadro español, que busca un nuevo título.
Redacción
Fotos: AFP
MAAZ