La preocupación por un estilo de vida saludable cada vez es más grande entre las personas. Si bien, la recomendación es evitar los refrescos siempre que se pueda, de vez en cuando no está mal y mejor aún si se eligen opciones con pocas calorías. Recientemente, la Profeco, en la Revista del Consumidor 555, del 2023, hizo un análisis y listado de cuáles son las alternativas poco calóricas para saciar tu antojo.
Y es que México es conocido por ser el mayor consumidor de refrescos a nivel mundial, además enfrenta un desafío importante en la lucha contra la obesidad y las enfermedades relacionadas con el sobrepeso. La obesidad aumenta el riesgo de padecer enfermedades, como:
- Diabetes mellitus
- Hipertensión
- Enfermedades cerebrovasculares
- Cáncer
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¿Qué opciones de refrescos con pocas calorías hay?
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) hizo un listado y en él destaca el refresco de Aurrera se presenta como una opción económica, con un precio de 7 pesos, y utiliza aspartame y acesulfame potásico como sus principales edulcorantes, no conteniendo fructosa, glucosa ni sacarosa, lo cual resulta en un total de 0 gramos de azúcares tanto por cada 100 ml como por envase. Sin embargo, es importante mencionar que no es recomendable para el consumo infantil debido a estos edulcorantes.
Por otro lado, Coca-Cola Light emplea una mezcla de aspartame y Acesulfame K, ofreciendo también 0 gramos de azúcares totales por cada 100 ml y por envase, siguiendo la línea de no incluir fructosa, glucosa, ni sacarosa. Al igual que el refresco de Aurrera, su consumo no es aconsejable para niños.
Peñafiel Light sabor naranja se distingue por una combinación de sucralosa y Acesulfame K, con un ligero contenido de azúcares naturales, específicamente 0.09 gramos de fructosa y 0.05 gramos de glucosa por cada 100 ml, sumando un total de 0.14 gramos de azúcares totales por 100 ml y 0.8 gramos por envase.
¿Qué contienen los refrescos?
Los refrescos están hechos de agua, que puede ser natural, gasificada o incluso mineralizada. La Profeco puntualiza que además, se endulzan con una variedad de azúcares como la sacarosa, conocida comúnmente como azúcar de mesa, y alternativas como el jarabe de alta fructosa o el jarabe de azúcar de caña. También pueden incluir jugos de frutas para aportar dulzura natural. Para realzar su sabor y preservar su calidad, se les añaden diversos aditivos alimentarios, que van desde conservantes hasta acidulantes, colorantes y saborizantes. Es más, algunas recetas incorporan cafeína o edulcorantes no calóricos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), aconsejan moderar la ingesta de azúcares libres a menos de 50 gramos diarios, aunque lo ideal sería no superar los 25 gramos al día para promover un mejor bienestar físico.