Estamos a menos de una semana de que se juegue la edición LVIII del Super Bowl, por lo que los jugadores de los equipos de Kansas City y de San Francisco ya se encuentran en la ciudad de Las Vegas, en lo que serán sus últimos días de preparación antes de su gran encuentro.
Este lunes por la noche los medios de comunicación de todo el mundo tendrán acceso a los entrenadores y a los jugadores de ambos equipos, donde podrán entrevistarlos y cuestionarlos acerca de su preparación rumbo al partido del domingo, mientras que los aficionados que tengan la fortuna de visitar la ciudad del pecado esta semana, tendrán la oportunidad de acudir, a partir del día miércoles y hasta el sábado 10 de febrero, a la Super Bowl Experience, la cual se realizará en un Centro de Convenciones que estará ambientado como si se tratara de un parque temático de fútbol americano, lleno de juegos interactivos y donde podrán conocer a grandes leyendas de la NFL, tanto del presente como del pasado, así como fotografiarse con el tan anhelado y codiciado trofeo Vince Lombardi, mismo que será entregado el domingo por la noche al equipo que resulte ganador de este Super Bowl.
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Mientras tanto, durante este jueves por la noche se llevará a cabo la gala de honor de la NFL en la cual serán entregados los premios a los mejores jugadores y entrenadores de la temporada 2023, en los cuáles por fin podremos saber si Lamar Jackson se llevará el galardón como el MVP, o si algún caballo negro logra arrebatarle dicho premio, ya que debemos de tener en cuenta que los ganadores de los premios son elegidos mediante las votaciones emitidas por un panel de periodistas deportivos, dentro del cual se encuentran varios exjugadores de la NFL.
Por otra parte, y por segundo año consecutivo, este fin de semana se llevaron a cabo los ahora llamados Pro Bowl Games, los cuales comenzaron sus actividades desde el día jueves de la semana pasada y concluyeron la tarde de ayer, con el partido de fútbol bandera entre los equipos representativos de la Conferencia Nacional, dirigidos por Eli Manning, quienes derrotaron al representativo de la Conferencia Americana, el cual se encontraba bajo las órdenes de Peyton Manning.
La NFL ha ido buscando la fórmula para poder continuar captando la atención de los aficionados mediante estos juegos, los cuales incluyeron diversas actividades para los jugadores, como Baker Mayfield, quien continúa brillando este año, ya que fue el mariscal de campo más certero dentro del concurso de precisión de pases, donde incluso derrotó al novato sensación C.J. Stroud.
Dentro de lo más destacable de esta serie de eventos, pudimos observar los juegos de “Dodgeball” o mejor conocidos como “quemados” en nuestro país, en los cuales Derrick Henry y Cee Dee Lamb hicieron gala de su gran destreza esquivando, saltando, atrapando y lanzando balones.
Podemos decir que de cierta forma este tipo de eventos cumplen con su cometido, el cual no solamente es entretener, sino también acercar un poco más a las grandes figuras de la NFL con sus aficionados, demostrándoles que también saben divertirse dentro y fuera de las canchas, y hemos de reconocer que es hasta cierto punto entretenido e interesante el poder observar a nuestros ídolos de los emparrillados haciendo algo diferente a lo que nos tienen acostumbrados, jugando de una forma mucho más relajada, como el centro Jason Kelce, quien acaba de retirarse, pero el cual compitió en diversas actividades en las cuales demostró tener un gran sentido del humor, mientras que bromeaba con sus compañeros.
A pesar de que la NFL cuenta con uno de los mejores productos deportivos a nivel mundial, mismo que le genera ganancias por miles de millones de dólares de manera anual, la realidad es que siguen sin saber qué hacer con el Pro Bowl, mismo que con el paso de los años se ha ido transformando y en cierta forma deteriorando, haciendo que se pierda el interés de verlo por los aficionados de cepa del deporte de las tacleadas, ya que ha cambiado completamente su esencia.
Muchos recordamos con cariño lo que antes representaba el Pro Bowl, el cual era un único partido que se llevaba a cabo anualmente en la paradisiaca isla de Hawaii, disputado una semana después del Super Bowl, al cual acudían los mejores jugadores de la liga e incluso los jugadores que acababan de coronarse, quienes portaban con orgullo los cascos de los equipos a los que representaban, y donde se jugaban el honor para demostrar cuál de las Conferencias era la mejor.
Hoy en día mucho han cambiado las cosas, por lo que vemos a los jugadores jugando con bermudas, lentes negros y utilizando gorros pesqueros, mientras juegan fútbol bandera, lo cual en cierta forma es bastante comprensible, ya que la intención de la liga es proteger la integridad de sus jugadores, evitando al máximo el que pueda ocurrir alguna lesión, misma que sería catastrófica para todas las partes involucradas, por lo que se han prohibido las tacleadas.
La NFL año con año seguirá evaluando la mejor forma de atraer a los aficionados casuales, ya que saben que hay un gran nicho de oportunidad si logran captar su atención, por lo que con este tipo de actividades buscan demostrar que el fútbol americano no solamente se trata de un rudo deporte en el cual los jugadores se taclean y lastiman todo el tiempo, sino que también existe la camaradería entre los jugadores, quienes también son seres humanos que saben cómo divertirse, sin embargo, mientras este producto que es el Pro Bowl no represente algo más que simple diversión para los jugadores, muy difícilmente podremos ver algo de mayor calidad para los aficionados de hueso colorado.
Por Diego Carreño
@diegocarrenoff