A través de internet podemos darnos cuenta de historias que, de otra forma, no creeríamos que son reales, este es precisamente el caso de Sonja Semyonova, una mujer canadiense que ha desatado furor debido a que a través de sus redes sociales ha hablado libremente sobre la atracción sexual que tiene por un árbol.
Se trata de una muy inusual historia de amor, misma que tiene lugar en Vancouver, Columbia, Británica, donde Sonja se ha manifestado abiertamente como una "alquimista erótica", lo que quiere decir que constantemente está en búsqueda de nuevas sensaciones a través de la experimentación sexual alternativa.
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"Soy Sonja Semyonova, una escritora y alquimista erótica cuyo objetivo es convertir las historias de tu mayor dolor en tu leyenda personal, y no, no soy de aquí. Mi sabor especial es la autointimidad, que es otra forma de decir que mi sueño es que te enamores profundamente de ti mismo y de tu entorno", se describe a sí misma en sus redes sociales.
La mujer de 45 años se ha definido a sí misma como ecosexual, esto especialmente luego de que durante la pandemia, en 2020, descubrió un roble que le cambió la vida, pues al verlo comenzó a experimentar lo que ella define como "experiencias eróticas", las cuales aumentaban cada vez que ella estaba más cerca del árbol.
Esto la llevó a tener un vínculo íntimo y una conexión con este ejemplar de la vegetación, a quien ha aclarado que no toca de manera sexual, sino que ella define su experiencia erótica única y distinta a la que se vive en la atracción y acto sexual humana convencional.
¿Qué es la ecosexualidad?
La ecosexualidad es una definición para las personas que establecen una conexión emocional, sexual y espiritual con la naturaleza. Aquellos que se identifican como ecosexuales pueden experimentar enorme atracción y placer sexual al interactuar con elementos naturales como árboles, ríos, montañas, o cualquier otro aspecto del entorno natural.
La razón por la cual algunas personas pueden experimentar atracciones sexuales hacia objetos de la naturaleza puede ser compleja y variada, y de acuerdo por lo revelado por Sonja, esto puede estar relacionado con una conexión profunda con la naturaleza y una forma particular de expresar su amor por el medio ambiente. Además, algunas personas encuentran que la conexión con la naturaleza es una fuente de inspiración y bienestar emocional.
Cabe mencionar que la comprensión y aceptación de estas experiencias pueden variar culturalmente y socialmente, y es esencial abordar estos temas con respeto hacia la diversidad de experiencias y orientaciones, pues para algunos la atracción hacia objetos de la naturaleza puede considerarse una forma única de vivir la sexualidad y la conexión con el entorno, pero no sigue las convenciones sociales tradicionales de la sexualidad humana.