La forma de escribir puede decir mucho de una persona. La grafología analiza la personalidad y los rasgos predominantes de ella solo con ver cómo firma o escribe determinadas vocablos. Vale mencionar que ello no se logra con el análisis de una sola letra, esta disciplina es como un rompecabezas, ya que se necesitan de las demás piezas para poder ver el todo. A pesar de ser una pseudociencia es muy consultada a la hora de hacer peritajes o investigaciones sobre la personalidad.
En ese sentido, a través del análisis de las letras en un papel, un grafólogo puede saber detalles ocultos en la mente de las personas. En este caso, nos referimos a cómo identificar si una persona es egocéntrica por la manera en que escribe la letra A. Te contamos lo que debes saber para conocer detalles sobre la personalidad del individuo.
¿Puede saberse si una persona es egocéntrica sólo con ver cómo escribe la letra A?
Es cierto que es muy difícil hacer análisis genéricos sobre la escritura de una letra porque nadie la escribirá de la misma forma que otro individuo. En este caso, a con la ayuda de la grafología podemos determinar si una persona es egocéntrica. Vale recordar que este tipo de persona, piensa que su personalidad es el centro de un círculo social, por ello no suelen comprender a los demás, pero dan por sentado que, a ellos, sí se les debe comprender y que es normal que los demás hagan un esfuerzo por hacerlo.
Para descubrir indicios de personalidad egocéntrica, nos enfocamos en la escritura mayúscula de la letra "A", y se debe prestar especial atención a su línea horizontal. Si esta línea se extiende más allá del espacio entre las dos líneas inclinadas, nos encontramos ante una persona generosa y desinteresada. Por el contrario, si la línea casi llena el espacio vacío, nos enfrentamos a alguien centrado únicamente en sí mismo, sin consideración por los demás.
En el caso de la A en minúscula, de acuerdo a los informes grafológicos, el ojo debe estar puesta en la forma en que se traza el óvalo. Una espiral sugiere un enfoque egocéntrico, donde los deseos de destacar son evidentes. Mientras tanto, un óvalo con doble vuelta indica intrigas, egocentrismo, tendencia al engaño y la mentira. Esta persona es diplomática y elocuente, pero también guiada por sus propios intereses.