En este lugar de México se encuentra la verdadera tumba de la llorona, ¿te atreves a ir?

Una de las leyendas más famosas de nuestro país es la de “La Llorona”, la cual data de una mujer que pena por diversas calles de México buscando a sus hijos con el ya clásico lamento de “¡Hay mis hijos!”.

Para muchos, seguramente solo es una leyenda urbana, pero para otros más esta historia les ha provocado horror y mucho miedo, incluso hay quienes aseguran que sí han escuchado este lamento y que les han puesto los pelos de punta, debido a esto es que en esta nota te revelaremos en que parte de México está la presunta tumba de “La Llorona”, ¿te atreverías a visitarla?.

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¿En dónde está la tumba de “La Llorona”?

Así como lo leíste en el párrafo anterior, la tumba de aquella mujer que vaga sin cesar para buscar a sus hijos se encuentra en nuestro país, a tan solo poco más de 4 horas para quienes viajan desde la CDMX.

Y es que, de acuerdo con varios youtubers que han viajado hasta este punto, la verdadera tumba de  “La Llorona”, se encuentra en Dolores, Hidalgo en el Estado de Guanajuato.

Cabe señalar que no se ha revelado el lugar exacto, sin embargo, quienes ya han ido a este punto aseguran que los locatarios son quienes te guían, sin embargo, para quienes deseen grabar deben pedir un permiso especial.

La historia de la tumba de  “La Llorona”

Locatarios de aquel lugar aseguran que desde hace muchos años (1800), personas que se dedicaban a la agricultura se quedaban a dormir cerca del punto donde ahora está la tumba, sin embargo, su descanso se veía interrumpido por los lamentos de una mujer.

Estos lamentos, corresponden a los de  “La Llorona” quien gritaba con dolor y desespero: “¡Hay mis hijos!”, sin embargo, quienes la escucharon tenían un destino fatal a los pocos días de haberla visto a lo lejos, pues aseguran que nadie le vio el rostro.

Debido a las constantes muertes al escuchar tales lamentos, el Vaticano envió a algunos frailes para constatar lo que estaba pasando, por lo que decidieron pasar la noche en este tenebroso lugar.

Y para su sorpresa, los frailes al igual que los agricultores también fueron sorprendidos por los lamentos de  “La Llorona”, fue así que entonces enviaron lo que estaba sucediendo al Vaticano, por lo que pronto llegaron nuevamente al lugar en donde pusieron una placa en latín en donde identificaron que esa es la tumba de  “La Llorona”.