¿HAY SOLUCIÓN?

Una catástrofe podría ocurrir este 2024 y comenzar a extinguir a la humanidad, según la Inteligencia Artificial

No se trata de guerras ni de colapsos financieros sino de algo que se podría mitigar si se aplicaran medidas fuertes

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Algunas ciudades costeras podrían estar en riesgo. Créditos: Freepik.

En un mundo interconectado y en constante evolución, los riesgos de una catástrofe global persisten como sombras en el horizonte de la humanidad. La Inteligencia Artificial (IA) ha emergido como un oráculo digital que podría esbozar escenarios futuros. ¿Cuál es la catástrofe más probable de 2024 según estas mentes de silicio? Sorprendentemente, no se trata de guerras ni de colapsos financieros, sino de un fenómeno cada vez más inquietante: la crisis climática.

Aún hay medidas que se pueden implementar. Foto: Pixabay.

Aunque suena casi a ciencia ficción, los algoritmos de predicción del riesgo, nutridos por una montaña de datos, apuntan a un incremento acelerado de eventos climáticos extremos. Varios factores convergen en este vaticinio y el ChatGPT los desentrañó y dio su “veredicto” de por qué en 2024 podría haber un desastre medio ambiental. 

¿Habrá una catástrofe climática en 2024? 

La IA considera que la acumulación sin precedentes de gases de efecto invernadero está alterando el equilibrio de la atmósfera. Sumado a esto, el derretimiento de los glaciares amenaza con desencadenar el aumento del nivel del mar, lo que pondría en peligro a comunidades costeras en todo el mundo.

Los niveles del mar podrían incrementar. Foto: Freepik.

Otro aspecto crucial es la interconexión de los sistemas ecológicos. La deforestación y la pérdida de biodiversidad están creando un dominó de desastres que se refuerza mutuamente. Por último, pero no menos importante, la inacción política a nivel global juega un papel crucial en la aceleración de este escenario apocalíptico. 

La IA asegura que no hay mucha voluntad política. Foto: Freepik.

¿Por qué ocurriría esta catástrofe en 2024?

La IA sostiene que las razones son multifacéticas y entrelazadas. Uno de los motores es el ciclo de retroalimentación positiva en los sistemas naturales. Por ejemplo, el metano liberado por el permafrost en deshielo acelera el calentamiento global, que a su vez provoca más deshielo. 

Además, el consumismo desmedido y la carrera por los recursos exacerba la situación. La IA sostiene que las economías centradas en el crecimiento perpetuo podrían ser el catalizador de esta crisis. Los intereses creados y las agendas políticas cortoplacistas son otro elemento que la IA identifica como contribuyente al agravamiento del problema.

El problema es muy complicado. Foto: Freepik. 

A pesar del escenario sombrío, la tecnología también ofrece soluciones. Desde energías renovables hasta agricultura sostenible, las herramientas para un cambio positivo existen y considera que lo falta es la voluntad colectiva para implementarlas antes de que sea demasiado tarde.

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