PANORAMA SOCIAL

Daniela Luján trasciende con el poder de la vulnerabilidad en su carrera y vida

Daniela Luján abre sus emociones y da un gran mensaje de acompañamiento y fortaleza

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Daniela Luján abre sus emociones y da un gran mensaje de acompañamiento y fortaleza Créditos: Foto: Diego Fierce / Arte: Luisa Franco

¿Cómo fue que llegas tan pequeña a ser actriz? ¿En qué momento crees que conscientemente quieres dedicarte a esto?

Mira, según yo siempre dije es lo que quiero, conscientemente (risas). Siempre me llamó la atención todo lo que tuviera que ver con contar historias, y cuando descubrí la televisión que esa en realidad fue mi referente, dije “eso es mágico, quiero estar ahí”. A los cinco años una tía me dijo que había un casting para Plaza Sésamo entonces ya sabes así de “mamá, mamá por favor llévame”, mi mamá no quería, entonces papá (risas). Me llevaron y me quedé.

"Para mí era un juego todo el tiempo, salir de la escuela e ir a clases de actuación, era como un taller de canto, de baile, de estar haciendo cuentos, yo me la pasaba muy bien. Y creo que empecé a ser muy consciente de que era un trabajo hasta que hice mi primera telenovela que fue Luz Clarita, y que era la protagonista. La verdad es que es muy distinto hacer un programa para niños que nada más están jugando y haciendo bola, y la telenovela sí requería otro rigor de horarios, de más disciplina, de más estudio, de más situaciones emocionales también.

"Eso te estoy hablando que yo tenía como siete años, y después hice teatro y fue la primera vez que descubrí que era estar arriba de un escenario y los aplausos de la gente y dije “wow de aquí soy”, me encantó esa adrenalina, esta sensación de tercera llamada, esa sensación cada función era adictiva. Después más grande, como por mi crisis de los treintas, dije ¿y si será?, y si a lo mejor yo quisiera hacer otra cosa, a lo mejor estoy destinada para hacer algo más, porque pues en una crisis uno se agarra de donde sea, hasta el destino, y entonces me lo cuestioné otra vez y no, la neta es que si no estoy haciendo algo que tenga que ver con el medio artístico, no me siento cómoda.

¿Cómo fue para ti crecer frente a las cámaras?

Fue divertido, en un inicio. Yo creo que crecer nunca es fácil, crecer siempre es incómodo, sobre todo la época de la pubertad y de la adolescencia, y luego teniendo un ojo externo que de por sí tú no te hayas… Creo que yo estaba como de ‘ay no pasa nada’, y mi mamá, que es una mujer muy sabia y que siempre fue mi “nananager” (risas), decidió en esa época alejarme un poco del medio artístico, para intentar tener una adolescencia normal, entre comillas, porque creo que ninguna adolescencia es normal. Pero creo que eso me hizo tener otra perspectiva de mí, de la vida, tener experiencias distintas a sólo estar trabajando, tener mi noviecito, irme de pinta, salir con amigos, nutrir un poco más mis referentes. Creo que esa decisión de mi madre fue muy sabia y muy sana para mí y para mí psique.

¿Lo volverías a vivir o cambiarías algo?

Sí, lo volvería a hacer todo. Lo pensé, lo pensé. (risas) No, pero todo lo que tiene que ver con mi carrera artística lo volvería a hacer.

Vestido y abrigo: Mariandrée Gaitán / Joyería: Swarovski / Zapatos: Kurt Geiger // Foto: Diego Fierce

¿Qué es lo más retador que has vivido en estos años de carrera?

Uy, qué buena pregunta. Yo creo que la música, cantar. Empecé muy chiquita y las telenovelas, por ejemplo, El diario de Daniela, empezó con esta cuestión de los 360, el grupo, música, conciertos, etc. Mientras más iba viviendo conciertos, me fue entrando más nervio y más ansiedad. Y un día ya más grande, dije, “bueno, pero ¿por qué si lo sufro tanto? Lo estoy haciendo”. Y entonces dije, ya, ya no más. Y ahora volvieron con los 2000s X Siempre, me invitaron y yo tenía mucho miedo de volverme a sentir así, de sentir como estos malestares físicos del nervio. Y creo que ese ha sido un gran reto y que estoy justo trabajando, o forzándome, no sé, como en terapia de choque justo ahora, porque vienen más conciertos.. Siento que ahí es una gran exposición, más que cuando actúo. Y de alguna manera tengo que trabajarlo, vivirlo, y transitarlo. Eso creo que ha sido lo más retador hasta ahora. Y lo acabo de vivir. Está recién salido del horno este reto.

¿Y cuál dirías que ha sido tu mayor aprendizaje?

Yo creo que hacer las cosas honestamente, ser genuino y hacerlo con el corazón. Creo que eso es lo que a mí me ha funcionado y lo que me mantiene tranquila, sobre todo en este medio que de pronto se vuelve muy pretencioso o como si fuera una carrera

de velocidad. He aprendido a decir, ¿qué tanto quiero hacer eso por estrategia y qué tanto quiero hacerlo de corazón? Porque si de veras es mi lenguaje y es mi manera de expresarme, pues tal vez no debo traicionarme y no volverme una mercenaria por una estrategia o por un dinero, y hacer un proyecto que me llene y que me guste, que sepa que puedo transmitir o comunicar algo de corazón.

¿Hay algún género o proyecto que te gustaría hacer en particular?

Sí, me gustaría hacer una serie, me gustan mucho estas comedias románticas femeninas,y también me gustaría hacer algo de suspenso psicológico.

Traje, zapatos, collar y aretes de perlas: Bimba y Lola / Collar y anillos: Uno de 50 // Foto: Diego Fierce

¿Cómo ha sido para ti este reencuentro con los 2000s X Siempre?

Tenía la idea de alguna manera que esas telenovelas habían marcado a una generación, pero no tenía idea de lo que la nostalgia podía mover ahora, ahora que estamos en nuestros 30s. Me parece muy mágico lo que me han escrito después del concierto de la Arena Ciudad de México, por ejemplo, y ahora en Monterrey, cosas como que han sanado algo de ese momento, que se dieron chance de volver a esa época, recordar sus momentos felices. Y por otra parte volver a ver a todos mis compañeros, que es como una reunión de primaria (risas), me parece muy divertido, y saber que esa amistad que se formó desde niños sigue viva y que podemos seguir siendo amiguitos de creación está muy bonito. Y a Martín (Ricca) sí lo había dejado de ver mucho, mucho tiempo. De pronto nos escribíamos por Instagram o cosas así. No se había desaparecido del mapa de mi vida por completo, pero volver a verlo y saber que nuestra química de compañeros sigue intacta es una maravilla. Eso lo estoy gozando mucho.

Es increíble que hables de la salud mental y el amor propio. ¿Es difícil mostrarte vulnerable y tocar estos temas?

Sí. En cuestión de salud mental falta mucho, pero se está normalizando bastante el hablarlo y eso me parece increíble porque claro, hay muchas cosas que desconocemos también como sociedad y que de pronto por la prisa de la vida dices “no voy a hacer caso a eso porque qué importa, hay que seguir produciendo, seguir haciendo, luego me deprimo o le doy chance a mi ansiedad que me diga lo que necesita, pero hoy no”, y eso creo que va mermando en el cuerpo, en el alma y en tu mente. Hablarlo, sí me lo pensé mucho, mucho, mucho, pero Envinadas es un espacio muy seguro para mí, aunque cada vez va creciendo más, pero me siento muy contenida. Hay muchas historias que me llegaron a raíz de eso, a contarme y a pedirme el contacto, por ejemplo, de mi psiquiatra. Eso me parece maravilloso, porque muchas veces cuando uno se siente mal, siente que es la única persona a la que le pasa y que nadie te va a entender. Y socializar los problemas o las emociones libera mucho y te hace sentir mucho mejor del simple hecho de hablarlas. Creo que Envinadas ha abierto justo eso, no nada más para nosotras tres, sino para toda la comunidad que nos ve.

¿Crees que ya están cambiando los estereotipos en pantalla o todavía falta?

Creo que sí, pero ahí vamos. Yo crecí en los noventas, la neta de cómo era la industria en los noventas, a ahorita, yo siento que hay un cambio y que se están representando muchísimas más historias, cuerpos, físicos, criterios, paradigmas, etcétera. Y me parece maravilloso, que falta un camino, claro que falta un camino, pero está sucediendo.

Blazer, pantalón y t-shirt: Alersundi / Collares: Swarovski / Anillo: Uno de 50 / Zapatos: Kurt Geiger // Foto: Diego Fierce

Y para ti, ¿cómo ha sido este camino al amor propio?

Ha sido interesante. Sobre todo, a mí me cuesta mucho poner límites porque me es importante, o me era importante, ser una “niña buena”. Creo que eso no es una historia que solamente me pasa a mí, somos mujeres y somos mexicanas, y creo que hay un gran peso cultural ahí que nos limita bastante. Pero es cuestión de ir trabajando y entender que esos límites empiezan por ti, no me voy a permitir quedarme en un lugar

donde me traten mal, donde me sienta incómoda, donde me sienta abusada. Es como ir paso a paso diciéndotelo tú, solita, a ti, para después ya poder sacarlo, es un trabajo difícil.

¿Para ti en qué radica el amor propio?

Esa es muy bonita pregunta. Yo ahora tengo sobrinos, tengo tres, de dos, de ocho años y una bebé de un año. Y… Voy a chillar. La forma en la que les hablamos a ellos, como clan,, en la que procuramos su bienestar tanto de supervivencia como emocional, la contención que les brindamos, o que intentamos brindarles por lo menos, creo que ese puede ser como un buen comparativo, estar para ti.

¿Cuál sería el mejor consejo que le darías a una mujer para sentirse fuerte y segura de sí misma?

Pienso en consejos que me ha dado mi mamá, en lo mucho que una trabaja, siento que nosotras no valoramos al cien por ciento todo lo que hacemos por nuestra familia, por nuestra pareja, por nosotras mismas, por nuestra carrera, por las carreras de las personas junto a nosotras, y queremos ser siempre como porrista o como ancla o motor para todos, y lo logramos, pero nosotras mismas no nos felicitamos por eso, no lo valoramos y creo que es muy importante decirnos, “que chingona soy, hoy lo hice muy bien, esta casa está funcionando porque lo estamos haciendo bien, este trabajo está funcionando porque lo estamos haciendo bien”.

Vestido: Mango / Joyería: Swarovski / Botas: Griselda Sánchez // Foto: Diego Fierce

MÁS SOBRE DANIELA

  • Alguien a quien admiras: Mis papás
  • Canción que te pone de buenas: “Put Your Records On”, de Corinne Bailey Ray
  • Algo que siempre traigas en tu bolsa: Mi celular
  • Si pudieras tener un superpoder cuál sería: Invisibilidad
  • El mejor consejo que te han dado: No tomarte nada personal, bueno, más bien no creerte
  • ni las críticas ni los halagos, no creerlos al cien, ninguno de los dos.
  • Comida favorita: Pozole

HA DICHO

“Muchas veces cuando uno se siente mal, sientes que nadie te va a entender. Socializar las emociones libera mucho”

 

Por Ailedd Menduet

Fotos: Diego Fierce para Bloom Estudio / Maquillaje y peinado: Leonel Urdaneta para Revlon México y Hot Tools / Locación: Fónico

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