SE RECUPERÓ

Llegó al hospital por un intenso dolor en la boca: le encontraron un pulpo atorado en la garganta

El paciente confesó a los doctores que acababa de comer un plato de mariscos

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En la pantalla pudieron observar las ventosas y el cuerpo del pequeño calamarCréditos: Pixabay

Este hombre nunca se imaginó que después de acudir al médico por dolor en la boca y por tener dificultades para ingerir alimentos acabaría en una intervención quirúrgica debido a que los médicos encontraron que tenía un pequeño pulpo atorado en la garganta, motivo por el cual estaba sufriendo los estragos de no poder deglutir alimentos.

El hombre de 55 años ingresó en el hospital después de comer un platillo que incluía pulpo. El paciente originario de Singapur quien se mantuvo bajo anonimato, les dijo a los médicos que comenzó a vomitar tan solo unos instantes después de comer el los mariscos, por lo que los doctores del Hospital Tan Tock Seng realizaron un escáner en el esófago y el tubo muscular que conecta la boca con el estómago para verificar por qué tenía las molestias; ahí fue cuando le encontraron el octópodo.

Lo primero que se observó en la imagen fueron sus ventosas | Foto: Jam Express

El pulpo estaba alojado en su garganta 

Lo que los médicos encontraron fue más que asombroso, pues en la pantalla pudieron observar las ventosas y el cuerpo del pequeño pulpo, el cual estaba alojado en su garganta y tenía una longitud de al menos cinco centímetros. El animal marino se encontraba en la unión gastroesofágica, donde se unen el esófago y el estómago.

El caso se trataba de una emergencia médica por lo que los expertos tuvieron que actuar de inmediato, sin embargo, por el área en donde estaba, al equipo no le quedó más remedio que realizarle una tomografía computarizada, conocida como esofagogastroduodenoscopia, la cual consiste en introducir un endoscopio por la boca y empujarlo hasta la garganta, es decir una sonda flexible con luz y una cámara en el extremo.

El animal marino media alrededor de 5 centímetros | Foto: Jam Express

Sus intentos iniciales de empujar o extraer al diminuto pero ofensivo calamar no tuvieron éxito, por lo que tuvieron que usar un endoscopio para maniobrar cuidadosamente más allá de la masa esofágica hacia el estómago, luego, los médicos usaron fórceps para agarrar la cabeza del pulpo y extraerlo.

Tras la intervención, el paciente se recuperó rápidamente del procedimiento y fue dado de alta dos días después. El equipo médico que compartió la historia, contó que los bloqueos de alimentos son uno de los problemas más comunes que se atienden y en la mayoría de los casos se tiene que usar "La técnica de empuje", ya que aplicar una fuerza excesiva puede causar una perforación esofágica.

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