Un 18 de febrero de 1949 nació en Estados Unidos, uno de los asesinos más temibles de la historia, se trata de Gary Ridgway, el peligro de las mujeres que se encontraban cerca de él.
Durante sus primeros años y su adolescencia Gary, creció y se desarrolló en McMicken Heights, Washington, vivía con su padre Thomas Ridway, su agresiva y distante madre Mary Rita Steinman, quien se encargaba de humillarlo a él y sus otros hermanos cada que le fuera posible.
Mary Rita madre de Gary Ridgway, solía atender a su hijo de forma grotesca y violenta, el sacar malas notas no era buena señal para Gary, ya que su Mary aprovechaba para golpearlo, además de eso este niño sufría de dislexia por lo que le costaba muchísimo comprender textos y leerlos.
Enferma Obsesión
El maltrato, los desprecios y la agresividad que su madre, le ocasionaron a Gary que fuera desarrollando sentimientos de odio y despreció hacia ella, así como en general al sexo femenino, por lo que bajo ninguna circunstancia toleraba ver ni estar cerca de aquellas mujeres que se dedicaban al trabajo sexual, pues su padre Thomas, insultaba a cada una de las que se encontraba en el camino.
Gary no conforme con maltratar y ofender a las mujeres que se dedicaban a la vida sexual, descargaba su furia contra todo animal que encontrara en su camino. En una ocasión confesó haber torturado y encerrado en la nevera a un indefenso gato, el dolor y la agonía que le provocaba a los animales era algo que él simplemente disfrutaba.
Conforme Gary crecía su odio y rencor crecían con él, a los 14 años apuñaló a sangre fría a un menor de tan sólo 6 años que sobrevivió, al ser detenido Ridgway declaró haberlo hecho solo para saber qué era “asesinar a alguien”.
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Vida amorosa fallida
Con el paso del tiempo Gary terminó sus estudios, se enlistó en la marina y se casó con una joven de la misma institución, pero años más tarde se divorciaron pues su matrimonio no fue lo que esperaban, años más tarde se casó nuevamente en dos ocasiones.
Ninguna de sus parejas sentimentales llegaron a sospechar nada, pues Gary se mostraba como un joven decente, recitaba la biblia y acudía frecuentemente a la iglesia, lo que nadie sabía era que él se encargaba de asesinar a diferentes mujeres.
Modus Operandi
Gary conducía por carretera en busca de “su presa”, solía fijarse que las mujeres de la vida sexual tuvieran una edad de los 15 a los 35 años y cumplieran con ciertas características, una vez que la encontraba la subía al auto y la llevaba a un lugar solo y lejano para tener un breve encuentro sexual, al término del mismo Ridgway, se lanzaba sobre la espalda de la mujer la amagaba con lo que tuviera a la mano y terminaba por asfixiarla.
Cuando Gary, tenía los cuerpos totalmente desnudos, los arrastraba hasta el “Green River” o Río Verde, algunos de ellos los lanzaba al agua y otros por el contrario los acomodaba a una orilla del río, entre las rocas y plantas con el objetivo de regresar al día siguiente para cometer necrofilia… Ridgway, solía dejar objetos como chicles, mapas, peces muertos incluso cigarrillos.
El error que terminó con Gary
En julio de 1982 un par de jóvenes paseaban en bicicleta cerca del río, se percataron del cuerpo sin vida de una de las occisas y aterrados huyeron del lugar para dar aviso a las autoridades.
Autoridades correspondientes acudieron al lugar de los hechos y sin mucho buscar hallaron el cuerpo ultrajado de Wendy Lee Coffield, una joven de 16 años que dedicaba su vida a la prostitución. Tiempo después los investigadores continuaron encontrando muchos cuerpos violentados de mujeres jóvenes dedicadas a la vida sexual.
La mayoría de las mujeres que fueron encontradas presentaban señas similares, por lo que los investigadores llegaron a la conclusión de que se trataba de un asesino en serie.
Luego de 20 años de espera e investigaciones, el sheriff Reichert, mostró parte de los análisis de ADN hallados en fluidos corporales dentro de los cuerpos de las víctimas, las diferentes muestras lograron coincidir que se trataba de Gary Ridgway, catalogado como “El asesino de Green River”, uno de los mayores asesinos en serie de Estados Unidos.
49 fueron las victimas de Gary Ridgway, por esto fue condenado a pena de muerte y con el fin de evitar la sentencia el 18 de diciembre de 2003, se declaró culpable y el dictamen cambió a cadena perpetua sin derecho a libertad condicional.