Uno de los monumentos más conocidos en el mundo es el que rinde homenaje a cuatro de los presidentes más trascendentales de Estados Unidos, aunque curiosamente, pocos saben que justo en el corazón de uno de los estados de la república mexicana hay una obra similar que rinde tributo a una de las culturas más aguerridas que habitó en México y que dejó un legado impresionante de costumbres, tradiciones, leyendas y de más elementos que enriquecen la multiculturalidad del país.
A diferencia del Monumento Conmemorativo Nacional Monte Rushmore que fue tallado en el centro de granito de las montañas Black Hills, el destino turístico que yace en Aguascalientes no ha tenido una difusión a nivel mundial, esto a pesar de que su historia detrás está llena de valentía, rebeldía y años de ardua labor.
La monumental Cabeza Chichimeca es obra del artista oaxaqueño Juan Justo Zárate, quien maravillado por la osadía y resistencia de los guerreros chichimecas decidió hacerles un homenaje labrando una figura típica de su cultura en el monte localizado en la carretera 70 de Aguascalientes a la altura del Pueblo Mágico de Calvillo, en el kilómetro 33.
Por cerca de 17 años, el talentoso mexicano trabajó en su escultura tallada en piedra, cuya elaboración hizo gala de su valor y determinación, pues su obra se encuentra situada a una altura de 20 metros sobre el suelo, estando además rodeada de una vegetación rica en serpientes de cascabel.
Además de los peligros propios de la naturaleza que rodea la impresionante Cabeza Chichimeca, Juan Justo Zárate llevó a cabo su tallado en medio de las inclemencias del clima y sin apoyo financiero, algo que lo hizo trabajar por años prácticamente solo, hasta que el destino lo reencontró con un amigo de la infancia, José Luis Rojas Villalpando, un empresario de la entidad que proporcionó recursos financieros para agilizar la obra maestra.
Historia detrás de la Cabeza del Gran Guerrero Chichimeca de Aguascalientes
Actualmente la escultura que comenzó a realizarse a finales del siglo XX aún no está terminada, pues le hace falta un águila que será esculpida a un lado del monumental rostro chichimeca, mismo que es considerado un paralelo mexicano de los rostros de los presidentes estadounidenses George Washington, Thomas Jefferson, Theodore Roosevelt y Abraham Lincoln esculpidos el monte Rushmore.
La Cabeza del Gran Guerrero Chichimeca de Aguascalientes, cuyas dimensiones son doce metros de altura por diez de ancho y siete de fondo, hoy se ha convertido en un destino turístico del estado, al cual acuden tanto extranjeros como nacionales. La leyenda que la inspiró data de mediados del siglo XVI, cuando tras la caída del Imperio Mexica, el dominio español continuó expandiéndose por todo el territorio del país, sin que esto impresionara a un grupo de indígenas chichimecas, el cual se alzó en armas contra el ejército de la Nueva Galicia en una serie de enfrentamientos bélicos que con el paso de los años fueron identificados como los combates de la Guerra del Miztón.
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