PODCAST

¿Lactancia materna o leche de fórmula?: Mitos y realidades

Durante años han existido dudas y debates sobre la lactancia materna y la fórmula, si una es mejor que la otra y si después de cierta edad ya no tienen los mismo beneficios para el bebé.

TENDENCIAS

·

La leche materna es el alimento por excelencia para el recién nacido, pues está llena de nutrientes que le favorecerá en su desarrollo, además al amamantar a tu bebé estarás estrechando el vínculo afectivo con él. Aunque este alimento está lleno de beneficios, aún existen muchos mitos alrededor y muchas madres optan por la opción de la leche de fórmula, ¿pero acaso este suplemento alimenticio puede compararse con la leche que produce de manera natural una madre? 

La respuesta es que no, la leche de fórmula no está ni cerca de aportar los beneficios que la leche materna da al bebé. Los seres humanos nacimos diseñados para alimentarnos del seno de nuestra madre y aunque no lo parezca, sabemos cuándo parar, pues el mismo organismo nos indica cuál es la cantidad de leche suficiente (a esto se le conoce como libre demanda). Al igual que si nos encontramos enfermos, se lo comunicaremos al cuerpo de nuestra madre y de esta forma ella comenzará a producir más nutrientes y anticuerpos que ayudarán en la salud, pues la leche materna se adapta a las necesidades del bebé, por lo que es normal que esta cambie de consistencia e incluso de color. 

La fórmula láctea es sólo un complemento alimenticio y, aunque también aporta hidratación y  energía, generalmente proviene de la leche de vaca, por lo que los nutrientes que tiene no están naturalmente destinados a los seres humanos. A menos de que exista algún impedimento por el cual la madre no pueda amamantar, se debe alimentar al bebé con leche materna por lo menos los primeros 6 meses de su crecimiento. Existen muchas dudas sobre cuándo se debe dejar de amamantar al bebé, ya que existen madres que dejan de dar pecho antes del año, pero la realidad es que se puede alimentar por lactancia materna pasados los 2 años y sigue siendo benéfico tanto para la madre como para el infante, sea cual sea el tiempo que se decida hay que tener en cuenta que el destete, (momento en que separaremos al bebé del seno) debe hacerse de manera paulatina para evitar problemas al bebé y a la madre. 

Si quieres saber más sobre la lactancia materna escucha el nuevo episodio de ¡En la mother, soy mamá!  

Mitos sobre la lactancia materna

Algunos métodos sobre la alimentación del bebé pueden transmitirse de generación en generación, desafortunadamente la información puede irse deformando hasta crear algunos mitos sobre la maternidad que también han sobrevivido y pasado por generaciones. 

Los mitos más comunes de la lactancia materna son que dependiendo del tamaño de los senos es la cantidad de leche que se producirá o que se deformarán los pechos al amamantar. La realidad es que nuestro cuerpo es capaz de producir la cantidad de leche materna suficiente y además nuestros senos terminan de desarrollarse durante el embarazo, por lo que no sufrirán ningún tipo de deformación. 

Otro mito de la lactancia es que dependiendo lo que coma la madre es el sabor que tendrá la leche o que después de cierto tiempo ya sólo es agua o se “echa a perder”. Es verdad que la leche puede cambiar de consistencia e incluso de color, pero no es porque esté caduca o porque se comió algún alimento en específico, la leche materna se va adaptando a las necesidades del bebé, pues no ocupa los mismos nutrientes cuando era un recién nacido a los que necesitará después de 6 meses o más. 

También es común escuchar que se deben hacer horarios para que el bebé se adapte o que se le debe cambiar de seno cada cierto tiempo. Debemos confiar en que el bebé sabrá cuándo parar y también debemos tener en mente que somos nosotras quienes debemos adaptarnos al bebé, por lo que se recomienda la toma a libre demanda. 

Amamantar es un proceso natural que debe irse aprendiendo con el tiempo, pero como todo proceso, puede llevarse de manera más sencilla si se está acompañado de una asesora de lactancia.  

XBB