Comparto contigo una frase que escuché el otro día que me hizo reflexionar: “Te vuelves bella cuando tomas decisiones bellas”. ¡Wow! Siempre pensando que la belleza es exterior, que está afuera, que es superflua. Pero, es al revés, tu belleza interior se refleja en el exterior. Y todo empieza con lo que decides.
Y es que mi querido lector, desde que abrimos los ojos cada mañana comenzamos a hacer decisiones, de todo, desde qué pensar, qué tan rápido despertar, agradecer o quejarte, tomar agua o café, hacer ejercicio, meditar, ver mensajes en el celular, etc., y así durante todo el día hasta que tomamos la decisión de cerrar los ojos y dormir. Alentador saber que al tomar nosotros las decisiones tenemos algún tipo de libre albedrío y control en nuestras vidas.
La belleza es subjetiva y cultural, tiene que ver también con una combinación de factores como genética, cuidado personal y valores. Las decisiones bellas pueden ayudarnos a sentirnos más seguros de nosotros mismos. Algunos ejemplos de decisiones bellas son:
1. Amarnos primero a nosotros mismos. Cuando nos queremos, nos cuidamos, nos procuramos.
2. Autoestima: para entender nuestra percepción de belleza. Haz decisiones que aumenten tu valor personal como alcanzar metas, mejorar habilidades y practicar autoamor.
3. Priorizar siempre tu salud física y mental. Comer una dieta balanceada, hacer ejercicio, dormir bien, estar hidratado y saber manejar el estrés.
4. Apariencia física: cuidarla a través del mantenimiento del pelo, rutina de cuidado de la piel y elecciones de ropa adecuadas para ti, para sentirte mejor y más cómodo.
5. Empatía y bondad. Tú decides cómo tratar a los demás, como tratas a otros refleja tu belleza interior.
6. Mentalidad positiva: el tener una buena actitud, enfocarte en la gratitud y afirmaciones positivas pueden hacerte sentir tu propia belleza interior.
7. Sé auténtico: las elecciones que haces deben ser genuinas, alinearse con tu esencia, no trates de ser alguien que no eres.
8. Educación y crecimiento personal: esto es algo en lo que vale la pena invertir pues te hace sentir más seguro y te hace ser una persona más interesante.
9. Sé consciente del impacto ambiental de tus decisiones. No se trata de ser un freak eco sustentable, pero definitivamente ser consciente de que vivimos en un mundo que hay que cuidar es muy importante.
10. Los vínculos sociales ayudan a construir relaciones fuertes y significativas con otros. El rodearte de gente que te aprecia y apoya puede subir tu autoestima.
Y por último y muy importante, la autoexpresión. Hay que abrazar nuestro estilo único de expresarnos, ya sea por medio del lenguaje, arte, canto, escritura o como decidas hacerlo.
Recuerda que tu decides tu actitud ante la vida, decides de quién rodearte, decides qué ver y qué escuchar. Hay cosas que tal vez no puedes decidir y que si estuviera en tus manos no elegirías, pero puedes decidir qué actitud tomas ante ellas.
La belleza física no debe ser un capricho millonario, pero sentirte bello en esencia sí lo es.
POR BRENDA JAET
MAAZ