En Estados Unidos, unas hermanas se reunieron después de 55 años tras haber sido separadas al nacer. Gracias a una prueba de ADN, una de ellas supo de la existencia de la otra y ahora no pueden estar alejadas.
Diane Ward, de 58 años, y Mary McLaughlin, de 55, nacieron de la misma madre. Sin embargo, ambas fueran dadas en adopción. La primera de ellas vive y fue puesta en adopción cuando era bebé. La segunda vivió con su madre biológica durante tres años antes de ser adoptada.
Hermanas separadas al nacer se reúnen 55 años después
La mayor de las hermanas, Diane Ward, nunca supo mucho sobre su familia. Sólo sabía el nombre de su madre, además, le dijeron que era hija única. Su infancia la vivió en Michigan y, sin saberlo, creció en una casa que se encontraba a unas cuadras de su hermana y su madre biológica, quien falleció de cáncer de mama.
En 1999 se mudó a Uffculme (Reino Unido) después de casarse con su hoy esposo, Colin. Convencida de que podría tener algún hermano o hermano que aún viviera en Estados Unidos, Diane compró una prueba de ADN en diciembre de 2020. Los resultados fueron contundentes: tenía una media hermana de la que nunca supo.
Mary McLaughlin se mudó a Paragould (Arkansas), donde también formó su propia familia. Tras una larga investigación, fue contactada por Diane a través de Zoom. Las videollamadas a una gran distancia fueron descritas por ambas como "amor a primera vista" y un "clic inmediato".
"Fue como si hubiera encontrado mi otra pierna. Cuando hablé con ella en Zoom por primera vez fue una sensación increíble", dijo Diane al diario británico Daily Mail.
Diane Ward viajó 8 mil kilómetros a la ciudad de Charlotte, Carolina del Norte, para reunirse con su hermana Mary, quien alquiló una casa en la playa en dicho lugar para que se queden las dos juntas. Al llegar al aeropuerto, el instante quedó inmortalizado con un emotivo abrazo.
"El momento más emocionante ha sido poner mis manos en la cara de mi hermana y darle un gran abrazo y un beso", dijo Diane al medio citado. "Encontrar a mi familia biológica me ha hecho sentir como si perteneciera. Estoy agradecida", agregó Mary.
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