Andrés Filomeno Mendoza, mejor conocido como "El caníbal de Atizapán" conmocionó a la sociedad mexicana en 2021, cuando en su domicilio ubicado en Atizapán de Zaragoza en el Estado de México se encontraron 4,300 restos óseos.
Nadie nunca hubiera imaginado que un adulto mayor, carnicero de profesión, considerado como amable y buen vecino fuera capaz de quitarle la vida a más de 30 mujeres a lo largo de más de 30 años.
La mente de Andrés
Los crímenes de Andrés fueron realizados con tal crueldad y precisión que se ganó el apodo de "El monstruo de Atizapán", pues destazó los cuerpos de sus víctimas, se los comió y no conforme con eso tomaba videos y fotografías de los hechos.
Sin duda, este criminal tiene un complejo daño psicológico que lo mismo lo hacía ayudar a sus vecinos cuando éstos lo necesitaban que recorrer las calles del municipio vecino de Tlalnepantla en busca de víctimas.
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Datos perturbadores
Te presentamos tres perturbadores datos sobre el Andrés Mendoza, el asesino de Atizapán:
1 Regalaba carne a sus vecinos
Desde joven Andrés, quien era de origen oaxaqueño se había dedicado al oficio de la carnicería, el cual dejó en 2013, debido a su avanzada edad, por lo que para sus conocidos no era raro verlo con manchas de sangre.
Tras su detención, varios vecinos contaron a medios de comunicación que en muchas ocasiones Andrés les regaló carne presuntamente proveniente del estado de Oaxaca, por lo que existe una alta probabilidad que fuera de alguna de sus víctimas.
2 Es fanático de Hannibal Lecter
Se presume que Andrés pudo haber matado hasta 60 mujeres, ya que algunos de los restos óseos encontrados en su sótano no pudieron ser identificados. Durante sus declaraciones, el feminicida confesó que la idea de cometer los crímenes surgió cuando vio la película "El silencio de los inocentes".
Desde entonces, Andrés se hizo fanático del Dr.Hannibal Lecter, a quien veía con admiración, por lo que todo lo que se refería a este personaje tanto libros, películas y series eran objeto de admiración para él.
3 Tenía un fetiche con los rostros
El escalofriante hallazgo en el sótano de la casa de Andrés incluyó una serie de rostros de féminas, a quienes Andrés les retiró el rostro, por considerarlas como bonitas o gustarle, antes de ser destazadas.
“El Caníbal” fue ingresado al Penal de Barrientos, pero al ser considerado un criminal de alta peligrosidad fue trasladado al penal de Tenango del Valle y se le dictó prisión vitalicia.
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