Una vez más Lionel Messi tiene la oportunidad de saldar esa deuda que tiene con Argentina que, con el peso de Maradona encima, ha intentado darle a la hinchada por años: el Mundial. Ahora, en Qatar 2022, llegó a una nueva final, esperando que no se repita la dolorosa derrota en Brasil 2014, a un pasito de alzar la Copa del Mundo.
Y es justo esa deuda la que más hace ruido en la carrera del rosarino, que para muchos no igualará los botines de grandes jugadores como Pelé o Maradona hasta que también sea un campeón del mundo. La historia pesa y los ojos del mundo entero están a la expectativa de lo que suceda el fin de semana.
Sin embargo, dentro de la albiceleste no hay dudas de lo que representa el delantero del PSG para el grupo, para su país y para el resto del planeta. “A veces parece que somos argentinos y pecamos un poco de egoísmo porque es argentino, es el mejor de la historia. Pero creo que no hay ninguna duda”, expresó Lionel Scaloni, seleccionador del conjunto sudamericano.
“Verlo es emocionante, porque cada vez que los ves genera algo a sus compañeros, a la gente y no sólo a los argentinos. Es una suerte y un privilegio que tenga puesta la celeste y blanca", destacó el entrenador en la rueda de prensa en el estadio Lusail.
Mientras tanto el astro argentino disfruta el juego y se le nota cuando arrastra la pelota entre sus pies para quitarse rivales. Él mismo lo dice. “Estoy disfrutando muchísimo todo esto. Me siento bien. Me siento fuerte para afrontar cada partido”, expresó en rueda de prensa en el estadio de Lusail.
Los datos de Messi
El camiseta 10 se ha ganado a pulso el título del mejor jugador del mundo. No solo por su extraordinaria y triunfal trayectoria, también porque en este certamen sigue rompiendo récords. Uno de ellos, por ejemplo, es que el delantero del París Saint Germain se ha convertido en el sexto jugador de la historia de la Copa del Mundo que logra marcar en octavos, cuartos y semifinales de una misma edición.
Messi, que en sus cuatro anteriores participaciones mundialistas no había conseguido marcar gol alguno en partido de eliminatorias, ahora se equipara en este logro con los italianos Salvatore Schillaci (1990) y Roberto Baggio (1994), el búlgaro Hristo Stoichkov (1994), el croata Davor Suker (1998) y el neerlandés Wesley Sneijder (2010).
Su gol contra Croacia, que además de significar el inicio de la goleada para llegar a la última fase, le valió para ser nombrado de nuevo como el mejor jugador del partido en la primera semifinal en tierras qataríes. Además, ha conseguido su quinto tanto en el Mundial, con lo que iguala al frente de la tabla de artilleros con el francés Kylian Mbappe.
A su vez, con el tanto rebasó este martes a Gabriel Batistuta como el máximo goleador de la albiceleste en la historia de los Mundiales con su undécimo tanto. Además, está a una asistencia de igualar a Diego Armando Maradona como el mejor pasador decisivo de la selección argentina en los Mundiales, con ocho.
También ya lidera también el registro de victorias, con quince; de partidos, con 25, y de titularidades, con 22, a lo largo de sus cinco Mundiales, desde Alemania 2006 a Qatar 2022. Asimismo, superará el domingo, si no pasa algo extraordinario, al centrocampista alemán Lothar Matthäus como el futbolista con más partidos de la historia de los Mundiales, con 25 cada uno.
La coincidencia con Ronaldinho y Mbappe
Entre las coincidencias que ponen a Messi como campeón del mundo hay una que destaca sobre todas. El sudamericano comparte, por ahora, una estadística con su excompañero en el Barcelona, Ronaldinho, así como con el delantero francés Kylian Mbappe.
Y es que los dos primeros, tras firmar con el PSG, actual club del argentino, consiguieron alzar la Copa del Mundo un año después de su fichaje con el conjunto parisino. Por su puesto, las estadísticas no hablan en la cancha, pero aumentan las ilusiones de muchos aficionados para que Lio consiga su tan ansiado triunfo.
Con información de EFE.
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