Cada año, en el 29 de enero se conmemora el Día Mundial del Rompecabezas, un divertido, entretenido y en varias ocasiones, barato, pasatiempo que sirve para que chicos y grandes pasen momentos inolvidables.
Los rompecabezas se han ajustado a cada época que pasa, representando a veces simple imágenes o siluetas, hasta complejos paisajes y grandes obras de arte.
Su precio puede ser muy variado, pues hay algunos que pueden costar unos cuantos pesos, hasta más de cientos miles, a su vez, el número de piezas puede ser muy pequeños, desde cuatros, hasta los varios miles, complicando así su terminación.
¿Cómo surgieron los rompecabezas?
Fue un día como hoy, pero de 1760, cuando un diseñador de mapas llamado John Spilsbury, logró crear por error el primero de estos, pues en una tabla de madera, corto sin querer las fronteras de las piezas, pero lo haría con tal exactitud que las piezas volvieron a encajar.
Posteriormente se empezaron a hacer varios más, siempre en madera y este pasatiempo cobró gran importancia en la alta sociedad, pues eran un poco costosos debido a su material.
La idea y negocio de Spilsbury se extendió tanto que además del mapa que ya había hecho, tenía también otros temas geográficos: el mundo, Europa, Asia, África, América, Inglaterra y Gales, Irlanda y Escocia.
También se usó como material educativo en Gran Bretaña, pues de esta forma se le podía enseñar sobre geografía a los niños, una costumbre que perduro hasta 1820.
En los años de 1900, los rompecabezas ya eran muy populares, pero a la vez sencillos de resolver, pues siempre había una guía previa de donde se debían colocar las piezas, o al menos un marco en el que colocarlas, pero los diseñadores elevaron aún más la complejidad, pues en ocasiones solo se colocaba algunas palabras sobre el tema del cual se trataba el rompecabezas. Por ejemplo, ellos colocaban la palabra “pareja” y las personas tenían que hallar la forma de amar a una pareja con las piezas que se les daba.
En 1929, durante la Gran Depresión, los materiales de madera se sustituyeron por cartón, lo cual fue un ahorro enorme para las empresas que se dedicaban a su creación, pero también ayudaron a que muchas familias pudieran familiarizarse con esta actividad recreativa, pues era más barato que muchas otras.
Los rompecabezas en la actualidad
Hoy en día estas piezas, que se siguen haciendo de cartón, pero con un material que dure más, como la plastificación, se han convertido en un pasatiempo para chicos y grandes, reuniendo, incluso, familias enteras para terminar una obra de arte, que incluso, debido al logro realizado, se han llegado a enmarcar y preservar por generaciones.
Cabe destacar que en la actualidad se realizan rompecabezas de otros materiales, como cristal, geodas e incluso metal, además se ha ido aumentando su complejidad, pues muchos buscan romper el récord del más grande del mundo, que actualmente lo ocupa un rompecabezas de únicamente 42 mil piezas.
dhfm