Un grupo de policías se encontró con una peculiar situación, luego de que vecinos de Lugo, España, denunciarán a un residente por realizar una fiesta clandestina en pleno auge de la tercera ola de COVID-19. Sin embargo, al llegar las autoridades se encontraron en un divertido embrollo, ya que notaron que el único presente en el inmueble era un gato.
Al comunicarse con el dueño del felino, el hombre explicó que el animal tiende a jugar con el equipo de sonido, ya que el gato aprendió a activarlo con una de sus patas y girar la rueda del volumen, motivo por el cual, los vecinos pensaron que se llevaba a cabo una fiesta.
Según el reporte, los habitantes del edificio de Rondas das Fontiñas expresaron a la policía local que era imposible descansar con el volumen de la reunión, razón por la cual, el dueño tuvo que regresar a su domicilio para aclarar lo sucedido.
El michi fiestero, el nuevo residente de Lugo
Luego de la jocosa situación y de que la noticia se hiciera viral en redes sociales, cibernautas no se hicieron esperar y recomendaron desconectar los aparatos de sonido y televisores para que no volviera a pasar la situación.
Por otra parte, algunos comenzaron a llamar al residente de Lugo "el michi fiestero", y tomaron con cierta gracia el comportamiento del gato dada la situación que enfrenta España por el nuevo repunte por COVID-19.
Gracias a lo anterior, usuarios afirmaron a manera de juego que el felino "estaba violando las reglas de cuarentena" e hicieron memes sobre las reuniones masivas.
KA