Un acto de racismo ocurrido en la ciudad de Hendersonville, Carolina del Norte, ha causado gran indignación entre los mexicanos, luego de que fuera captado el momento en que un grupo de latinas, entre ellas varias mexicanas, fueron echadas a patadas de una piscina pública por el simple hecho de escuchar música en español.
El condenable acto ocurrió en el centro recreativo Flex Fitness Center al sur de Carolina del Norte, lugar hasta donde acudió la policía local con el fin de expulsar a las latinas quienes simplemente disfrutaban de un momento de esparcimiento en familia.
“Duele tanto ver la desigualdad y el racismo” se escucha decir a una de las afectadas en un video que ha sido compartido ampliamente en redes sociales y que ha desatado un sin fin de comentarios condenando el acto.
El grupo de latinas quienes conviven con sus familias, fue retirado por la fuerza por un alguacil de Hendersonville, quien fue llamado por la encargada del lugar.
Racismo en su máxima expresión
Según narraron las mujeres afectadas, su único crimen fue escuchar música en español, e incluso lamentaron la forma en que trataron a sus hijo, quienes fueron sacados a la fuerza de la piscina. “La policía (está) esperando a que nos vayamos. Nos corrieron por tener música, ese fue el problema, escuchar música mexicana”, así lo narró una de las mujeres quien ante el acto de injusticia decidió realizar una transmisión en vivo en Facebook.
Entre los dimes y diretes que se dieron por el acto de racismo, una de las mujeres que fue echada del lugar, reclamó al alguacil que otra mujer en el lugar tenía música pero como era en inglés a ella no le decían nada.
Asimismo narró que la encargada desconectó su bocina y se la llevó a diferencias de las mujeres que escuchaban canciones en inglés, lo que a todas luces representa un acto de discriminación.
Más tarde, consultados por medios locales, la Oficina del Alguacil del condado de Henderson confirmó que el centro recreativo pidió la presencia de los agentes alegando que "personas se negaron a abandonar el área de la piscina después de ser solicitada por la gerencia".
Finalmente las mujeres afectadas sostienen que ni siquiera se trató de una situación donde se hubiera violado alguna regla del lugar, pues el lugar ha permitido que otros clientes escuchen música en inglés, pero ellos fueron expulsados al escuchar música en español, por lo que aseguraron llevarán su caso ante la corte.