Han sido cuatro años de un ritual que inicia antes de que ver el brillo del sol. A las 4:30 de la mañana Don Felipe se alista para iniciar el camino que en casi dos horas lo llevará a su lugar favorito: el conocimiento. A sus 84 años, se ha convertido en la persona de mayor edad que se titula en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), un logro que se gestaba mientras también vendía verduras en el Mercado de Teacapa.
Felipe Espinosa tenía 79 años de edad cuando decidió cumplir al fin un sueño que tenía décadas guardado en su corazón. En 1973, mientras guiaba el vaivén de una escoba para asear una empresa petroquímica y ganarse el sustento, descubrió cuánto le maravillaban los procesos casi mágicos que en ella sucedían, desde entonces quiso conocer más de las ciencias exactas, pero las necesidades eran más grandes que los gustos y debió postergar esta meta para llevar comida a su hogar y brindar la educación que el no podía tener a sus cinco hijos.
Fue en 2017 cuando presentó el examen para matricularse en la carrera de Ingeniería en Procesos y Gestión Industrial, para la que le era requerido tener conocimiento básico de matemáticas y físico, saber utilizar las tecnologías de información o leer en inglés; tras cumplir con el trámite fue aceptado y ahora, a pesar de la pandemia de COVID-19 y los cambios académicos que con ella llegaron, logró culminar sus estudios y piensa en seguir con la maestría.
“Le tiene usted que echar ganas, como dicen: Si es uno chango viejo, hay que hacer ‘maromas’ nuevas y allí se iguala usted con los jóvenes. La superación del humano está en la mente, es una cosa muy grande la mente”, consideró Don Felipe, quien cuando iba a la Universidad no llevaba mochila, sino un costal para cargar sus implementos escolares.
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Antes de estudiar y antes de vender verdura, Don Felipe se ganaba la vida en el campo, también de obrero y hace más de 50 años formó parte del Ejército Mexicano, pues entró a la institución en 1962.
Luego de una vida laboral tan activa, Don Felipe entró al recinto para aprender.
Logística Inversa, Ecuaciones Diferenciales, Ingeniería de Métodos, Razonamiento Algorítmico o Teoría de Sistemas.
Pero Don Felipe llevó su poder universitario más allá de las aulas y en 2020 participó en una mega marcha con más de 100 mil estudiantes que en marzo pidieron justicia por el asesinato de compañeros de la UPAEP, en Huejotzingo.
Si bien tomaba dos camiones diario y hacía casi dos horas de trayecto para aprender nuevos recursos académicos, el ímpetu de Don Felipe por aprender y por solidarizarse con la comunidad estudiantil a la que pertenece se convirtieron en sus enseñanzas para el mundo.
LA FRASE
“¡Sí se puede! ¿Qué me detiene? Oigo bien, veo bien, razono bien, no tengo la mente hueca. El estudio es grandioso: se estudia para la superación, para una vida mejor”, Felipe Espinosa Tecuapetla, Ingeniero de la BUAP
DATO
9 Cuatrimestres completó el destacado estudiante.
DZA