Todo ocurrió un 12 de mayo del año 2012, cuando la joven Elize Matsunaga llena de odio y celos asesinó a sangre fría a su marido Marcos Matsunaga, un reconocido y multimillonario empresario con quien años antes había contraído nupcias. El cuerpo de Marcos fue descuartizado y desmembrado para ser echado en bolsas de basura y ser arrojado en una zona boscosa de Sao Paolo. La historia estremeció a Brasil y al mundo entero.
Elize Matsunaga con sus propias manos decidió y planeó premeditadamente matar a su esposo, de quien sospechaba la engañaba por lo que contrató a un detective privado que confirmara sus sospechas. La tragedia sucedió en su lujoso departamento ubicado en Sao Paolo, donde Elize lo atacó hasta quitarle la vida. Las cámaras de seguridad del condominio que fueron usadas para el juicio, mostraban a Marcos llegando a su departamento con una pizza en la mano, horas después una Elize fúrica arrastraba hacia los elevadores unas bolsas negras de basura, que por el peso, todo indicaba que el empresario iba en ellas.
Elize Matsunaga fue detenida, sus coartadas fueron insuficientes para demostrar su inocencia y fue encarcelada, su juicio conmocionó a la sociedad, y fue el más mediático en la historia de Brasil, por lo que años más tarde inspiró una docuserie en Netflix donde su historia fue contada.
Multimillonario obsesionado
Marcos Kitano Matsunaga, era uno de los herederos de “Yoki'', una gigantesca marca de comida en Brasil, Marcos tenía la vida resuelta. Era un hombre que viajaba por el mundo, vestía bien, iba a los mejores restaurantes y pagaba por la mejor compañía… Hasta que se encaprichó y se enamoró de Elize, una joven de familia humilde que se dedicaba a la prostitución.
Con el tiempo, las salidas a los moteles comenzaron a convertirse en citas formales en las que él la presentaba con sus excéntricos amigos millonarios o con su familia. Todos quienes conocían a la pareja, veían que él la trataba como un caballero y que procuraba comprarle lo mejor de lo mejor. Sin embargo, lo que no veían era que el millonario era un adicto a las mujeres y que ella ardía en celos por eso.
Elize fue condenada a 19 años de prisión, ella confesó con frialdad el crimen, le disparó a su marido y lo cortó en pedazos con un cuchillo. La hija de la pareja Kitano Matsunaga tenía doce meses cuando sucedió la tragedia. La pequeña quedó bajo custodia de la familia paterna.
La docuserie Elize Matsunaga: Érase una vez un crimen, puedes verla en la plataforma de Netflix.