En el puerto jarocho lo único que nunca cesa es la música, no importa si es de día o de noche, entre sones y danzones, Veracruz debe explorarse con ánimo festivo.
Las costas veracruzanas fueron descubiertas un 22 de abril de 1519 por Hernán Cortés; desde entonces, el puerto ha sido la puerta de México al mundo, por su incesante intercambio comercial. Para entender los contrastes del estado, el primer sitio a visitar es La Antigua, en donde podrás explorar la primera aduana del continente, caminar entre las ruinas de la primera casa de Hernán Cortés en México y admirar las raíces de una ceiba de más de 500 años, en la que se dice amarró sus naves. Desde historia hasta ecoturismo, Veracruz lo tiene todo.
De vuelta al origen
Construida con corales y piedras de río, durante el siglo xvI, ahí se instauró el primer
ayuntamiento y la primera capilla de México.
Tradición que da vida
En cada esquina se escuchan sones que invitan a adentrarse en la historia del puerto. La Bruja es uno de sus bailes más tradicionales.
Grandeza gastronómica
No dejes de pedir un Vuelve a la Vida en las Delicias Marinas, en la Antigua; una bomba con frijoles en La Parroquia, Puerto; y un arroz a la tumbada en Villa Rica, Boca del Río.
Aventura al máximo
50 kilómetros al norte del puerto se encuentran las Dunas de Chachalacas, espectacular sitio para practicar sandboard y explorar un lugar único en México.
Kayak a la isla de Sacrificios
Rema, muy temprano o al atardecer, en este hermoso lugar rodeado de naturaleza, ideal para snorkelear entre arrecifes.
Isla de enmedio
¿Arena blanca y agua color turquesa en Veracruz? ¡Sí! Explora la isla en paddle-board. Desde ahí, el atardecer desde es mágico.
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