Tras el aumento de ciberdelincuencia en todo el mundo, los internautas se preguntan si es necesario instalar un antivirus en sus dispositivos móviles, tanto en Android como en iPhone.
Los virus informáticos funcionan de manera distinta de PC y Laptop a equipos móviles, sin embargo, tu celular también puede padecer la visita de algún tipo de malwere, pishing o demás.
¿Qué es un malware?
Se traduce de manera literal como “software malicioso” cuyo fin es infectar un equipo electrónico. Los primeros móviles que empezaron a sufrir estas calamidades fueron los Android, y aunque no proporcionaba el mismo daño que a un ordenador, es necesario tomar ciertas precauciones.
Hay cierta carga dañina, conocida como “payload”, cuyo objetivo es detonar: bombas de publicidad, modificación del sistema, secuestro de terminal, robo de datos, minado de criptodivisas, entre otros.
Los casos que llegan a estos extremos son pocos, pero sí provocó la histeria colectiva entre los usuarios de Android y iOS. Detonó en empezar una búsqueda de antivirus que les dieran una doble protección o encontrar alternativas que les brindaran mayor seguridad al usar su móvil.
Estos son los tipos de virus más comunes
De acuerdo con la Oficina de Seguridad del Internauta de INCIBE (OSI), dentro de la gama de los malware, hay unos “cotidianos” que se pueden replicar a un smartphone. Conoce cuáles son y protégete de ellos:
Adware
Es el que te aparece como publicidad no deseada o engañosa. Comúnmente salen al navegar por internet como un “pop-up” que ocupa toda la ventana y tiene un gran contenido visual, las versiones más recientes ya incluyen audio.
Su fin es generar ganancias monetarias a sus creadores y puede llegar a registrar errores en los motores de búsqueda como: Google, Yahoo!, Bing, entre otros. Asimismo entorpece la navegación del usuario y la rapidez del explorador usado.
Para evitarlo
- No abras enlaces de descarga de páginas externas a las del proveedor oficial.
- Revisa que al instalar una app no traiga consigo un buscador, programa o complemento.
Spyware
Sin duda uno de los más peligrosos, este recopila de manera fraudulenta tu información personal y bancaria. Un ejemplo son los Keyloggers, virus que monitorean nuestra actividad en el teclado para luego enviarla al ciberdelincuente.
Para evitarlo
- Instala y mantén actualizado el antivirus para móvil de tu preferencia.
- Evita conectar tu móvil a dispositivos desconocidos como USB o discos duros externos.
Gusanos
Tienen la capacidad de replicar un “error” dentro de un programa o dispositivo con el fin de alterar el procesamiento del mismo. Lo encontrarás comúnmente en anuncios con las palabras: sexo, apuestas, regalos o premios.
Para evitarlo
- Apóyate de tu antivirus y refuerza la navegación segura en tu móvil.
Troyano
Este podría encabezar la lista de los peores, debido a que se presenta como un “software legítimo” que termina robando tu información personal y dejándote a merced del ciberdelincuente.
Para evitarlo
- Evita instalar aplicaciones “no oficiales”, ni dentro ni fuera de la app de tu proveedor.
- Al usar tu explorador revisa que no abra pestañas o ventanas emergentes, podrían estar intentando instalarlo en tu equipo.
Ransomware
No sólo toma por completo el control del dispositivo infectado, este virus bloquea o cifra la información para que el ciberdelincuente extorsione monetariamente a su víctima. Lo peor es que se puede transmitir como lo haría un gusano o un troyano, se camuflajea en correos, páginas web, descargas “inofensivas”, entre otros.
Asimismo aprovechan las fallas de seguridad que tengan los dispositivos en sus sistemas operativos, aplicaciones u otro software con el que cuente tu móvil.
Para evitarlo
- Ten extremo cuidado con la información que te llega adjunta en correos electrónicos.
- No ejecutes ningún programa externo a tu dispositivo, proveedor, etc.
- Realiza copias de seguridad y guárdalas en una nube. Con esto tu información se podrá recuperar y no estarás a merced del hacker.
Apps maliciosas
Por último, pero no menos importante, hay un virus que funciona igual que una aplicación móvil. Pide permisos de funcionalidad, privacidad e incluso seguridad y así es como toma el control. Roba este tipo de información: contactos, credenciales, imágenes, vídeos, etc.
Para evitarlo
- Recuerda siempre bajar aplicaciones oficiales de tus proveedores, los más comunes son Google Play Store o la Apple Store.
- Verifica su nivel de valoración, comentarios de otros usuarios e incluso la información del desarrollador.
- Al instalarla lee los permisos que solicita la app y que concuerde con su funcionalidad. Ejemplo: Si la aplicación es de edición fotográfica, pero te pide permisos para acceder a tus contactos, ¡cuidado! Puede ser maliciosa.
Hay otro virus que solo se ha detectado en PC o laptops, y aunque no se ha visto en celulares, te compartimos que los “bontets”, también conocidos como “red zombie” o “red de infección”, se encargan de expandir el malware para el envío masivo de: correos spam, ataques de denegación de servicio o DDoS, robos de credenciales, etc.
Para evitarlo
- Replica las sugerencias anteriores a tu PC o laptop.
- Usa credenciales con caracteres alfanuméricos o cambia tu contraseña periódicamente.
- Evita y también borra correos maliciosos o sospechosos.
Hablemos de antivirus
Así se denominan a los programas que procuran, cuidan y protegen a tu computadora portátil o de escritorio. Sin embargo, actualmente salió una rama para móviles que monitorean la navegación, vigilan las conexiones y refuerzan la privacidad. Estas acciones son más que suficientes para tu dispositivo.
Aunque ya vimos los tipos de malware que podrían llegar a almacenarse en tu celular, prevenirse con un antivirus diluye el riesgo de infección, principalmente en Android. Algunos especialistas en informática ya están recomendando su uso y estos son los más conocidos.
Para iPhone:
Para Android:
Cabe recalcar que mientras uses tu dispositivo móvil con responsabilidad, no será sumamente necesario la instalación de un antivirus, será más una protección adicional y opcional. Recuerda, esto es lo que debes cuidar al usar tu celular:
- Descargar sólo aplicaciones de la tienda de tu proveedor.
- Comprobar la legitimidad del desarrollador en las descripciones en la app.
- Leer los comentarios de los usuarios.
- Verificar el número de descargas y los permisos de las aplicaciones.
- Evitar los enlaces no verificados.
- Mantener actualizado el sistema operativo y las apps del celular.
- No utilizar las redes Wi-Fi gratuitas.
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