DESDE AFUERA

Confianza y desconfianza

Pero aunque AMLO enfrentó a la DEA, fue una decisión política que la DEA entiende -aunque no le guste-

OPINIÓN

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José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

Puede que a muchos no guste, incluido quien esto escribe, pero el reciente diferendo a propósito del secuestro en México y arresto en Estados Unidos de Ismael “Mayo” Zambada puso de relieve menos la desconfianza estadounidense -que la hay- hacia el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que respecto a las que consideran como comprometidas estructuras de los organismos de seguridad mexicanos. 

El gobierno López Obrador y su estrategia de “abrazos no balazos” chocaron desde un principio con la visión estadounidense de la "guerra contra las drogas” estadounidense y con la presencia y actuación en México de una Agencia Antinarcóticos (DEA) que no solo tiene un ya largo resentimiento hacia el país y sus instituciones, sino que choca contra otras organizaciones de su propio país tanto para subrayar su jurisdicción como para justificar su existencia.

Pero aunque AMLO enfrentó a la DEA, fue una decisión política que la DEA entiende -aunque no le guste-. Su desconfianza y la del gobierno estadounidense respecto al gobierno de AMLO salen más de desacuerdos ideológicos y corruptela real o percibida que de incapacidad de entendimientos.

Pero de cualquier manera pesa, como los varios plantones que López Obrador dio al presidente Joe Biden.
Esto ciertamente no incluye la presunta presencia de espías rusos, la asumida influencia en México de la inteligencia cubana o la llegada de mercadería china -se trate de acero o de autos- que trata de pasar a Estados Unidos a través de intermediarios mexicanos.

La desconfianza más bien se refiere a los organismos de seguridad mexicanos, a los que se considera como profundamente comprometidos con los cárteles del narcotráfico, y no del inicio del régimen de AMLO, sino ya de décadas a la fecha.

La desconfianza respecto a la policía mexicana no es nueva. Recuérdese si no el caso del general Agustín Gutiérrez Rebollo, el que fuera “Zar Antidrogas” del gobierno de Vicente Fox y aprisionado en México por sus vínculos con grupos narcotraficantes; o posteriormente, el caso del exsecretario de Seguridad, Genaro García Luna, ahora enjuiciado en Estados Unidos.

Y si alguien quisiera poner el tema en duda, bastaría con revisar la declaración atribuida al propio “Mayo” Zambada, que relata haber asistido a su encuentro del 25 de julio con Joaquin Guzman Lopez, que al final lo secuestró y llevó a los Estados Unidos, acompañado de un comandante de la policía judicial del estado de Sonora. Igualmente, que esperaba reunirse con el gobernador Rubén Rocha.

Y eso puede colocarse en la categoría de “nada nuevo bajo el sol”.

Otra faceta es el temor, o la preocupación estadounidense, es que los grupos delictivos mexicanos hayan sido infiltrados por agentes de la inteligencia de países o organismos hostiles a sus intereses, especialmente los rusos.

Y si alguien cree que el gobierno mexicano confía en el estadounidense...

POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS   

COLABORADOR    

JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM           

@CARRENOJOSE1

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