DEFINICIONES

Moderador

¿El moderador deja de ser periodista? Por supuesto que no. Pero el moderador, en el debate, debe ser absolutamente imparcial. Lo seré

OPINIÓN

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Manuel López San Martín / Definiciones / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

En redes sociales, un grupo no mayor, pero sí algo ruidoso, ha promovido una polémica estéril que busca colocar a quien no tendría que ser protagonista, en el centro de la atención.

En el marco del Primer debate presidencial que moderaré junto con la periodista Denise Maerker, se han alimentado críticas desde un polo radical, por señalamientos que hice, en ejercicio de mi libertad de expresión, contra un funcionario público, Hugo López-Gatell, que no es candidato a cargo alguno en este proceso electoral ni forma parte del equipo de campaña de alguna candidatura.

Morena decidió no apoyarlo, pese a que él aspiró a ser candidato a jefe de Gobierno, senador y diputado. Ese partido sabrá por qué no lo postuló.

Yo soy periodista y el periodismo implica señalar, revisar y criticar al poder, a funcionarios y exfuncionarios, así como sus decisiones de gobierno. ¿El moderador deja de ser periodista? Por supuesto que no. Pero el moderador, en el debate debe ser absolutamente imparcial. Lo seré.

El que opine, como lo he hecho aquí desde hace años, que la gestión de la pandemia a cargo de López-Gatell fue un desastre, es una verdad que encuentra argumentos en las contradicciones y mentiras del exsubsecretario y, sobre todo, en las más de 700 mil muertes de mexicanos, así como en la disminución de la esperanza de vida por el aumento de decesos por COVID-19.

Pero eso nada tiene que ver con una candidatura ni con un partido. Tampoco, con el proceso electoral en curso.

Y aunque algunos anden buscando pretextos, acá no los van a encontrar: el debate no es conmigo. El debate es entre candidaturas. No es entre un político o influencer que quiere reflector y un periodista que hizo ejercicio de su libertad de expresión en un espacio noticioso de información, análisis y opinión.

En un debate, deben ser las y los candidatos quienes luzcan, contrasten ideas, propuestas y visiones de país. Los reflectores deben apuntar a Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez.

En el debate del domingo 7 de abril, seré imparcial. Que no haya duda de eso. Las 108 preguntas que el INE nos entregó el pasado miércoles a Denise y a mí serán revisadas y analizadas, y —como lo dijimos ambos— seleccionaremos las 30 que se plantearán a las candidaturas hasta el último momento. No habrá ventaja ni concesiones para nadie. La moderación será equitativa y equilibrada.

Los moderadores somos el vehículo entre la ciudadanía que envió preguntas y quienes aspiran a gobernar México.   

Lo mío es el periodismo y la crítica en mis espacios. Y lo seguirá siendo. El día después, el 8 de abril, estaré, como desde hace más de 20 años, en los espacios a mi cargo y no dejaré de señalar y cuestionar al poder.

Pero en el debate, la imparcialidad es condición necesaria. Que contrasten propuestas e ideas las candidatas y el candidato, y que los ciudadanos tengan elementos para tomar una decisión informada el 2 de junio. Que haya suerte para todos en este primer debate.

POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN

M.LOPEZSANMARTIN@GMAIL.COM     

 @MLOPEZSANMARTIN

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