VICTORIA 147

Lo bueno, lo malo y lo feo de emprender

Cuando tenemos un problema damos vueltas en círculos para llegar a la misma solución y es fácil ciclarse. ¿Cómo hacerle frente a un mismo problema de manera distinta?

OPINIÓN

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Ana Victoria García / Victoria 147 / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

Siempre he dicho que emprender es una montaña rusa de emociones, una experiencia que en un mismo día puede llorar de alegría y de frustración sin previo aviso. En un mundo con baja posibilidad de control y donde perseguir la chuleta lleva consigo asegurar la de muchas más personas que dependen de ti, el estrés puede nublar la visión.

Cuando tenemos un problema damos vueltas en círculos para llegar a la misma solución y es fácil ciclarse. ¿Cómo hacerle frente a un mismo problema de manera distinta?: Pensando diferente.

Existe el pensamiento lineal y pensamiento lateral. El lineal es el que comúnmente nos enseñaron en la escuela: pregunta - respuesta, optimizamos la forma de pensar y aprendemos a responder. El pensamiento lateral hace cruces, amplía opciones, no llega de manera lógica e inmediata a las respuestas, si no que abre la forma de pensar a asociaciones que no son tan predecibles o comunes.

Como emprendedora no tengo todas las respuestas, pero algo a lo que acudo cada vez que en la montaña rusa voy en caída libre es: preguntar.

Mi pensamiento lateral se alimenta de hablar, pedir consejo y ampliar mi visión. Escuchar maneras diferentes y objetivas, me cambia los lentes empañados con los que estoy viendo el problema.

Tomar perspectiva y hacerme estas preguntas me hace aclarar momentos de duda:

  1. ¿Cuál es el problema real?
  2. ¿Cómo podría plantear el problema de una nueva forma?
  3. ¿Quién puede ayudarme?
  4. ¿A quienes les impacta?
  5. ¿Cómo puedo involucrar al equipo para solucionarlo?

Toca atravesar pantanos profundos cuando emprendes, pero también hay días soleados. Para aquellos momentos difíciles, me recuerdo: “esto también pasará”.

Por otro lado, las personas de manera inconsciente tomamos roles y jugamos juegos psicológicos en nuestras interacciones con los demás y cuando nos enfrentamos a problemas.

Está el rol del salvador, los que tratan de arreglar la vida de todos incluso cuando no se les haya pedido. Está el del perseguidor que es la persona que señala, reprocha, no asume responsabilidad, y está el rol de la víctima, que demanda compasión, creen que el mundo es injusto y necesitan que los demás resuelvan. Me sirve entender dónde caigo cuando enfrento un problema y, así, poder salir de ahí.

Si eres salvador, deja que los demás resuelvan; si eres perseguidor, desarrolla la capacidad de guiar en lugar de criticar y aprender que hay distintas formas de resolver. Y si eres de los que cae en el rol de víctima, trabaja en ser consciente de tu responsabilidad, aprender a resolver y tomar actitudes proactivas ante las situaciones complejas.

POR ANA VICTORIA GARCÍA
FUNDADORA Y CEO DE VICTORIA147

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