Aquel “INE no se toca”, ese órgano sobrio, imparcial y que defendía el voto de los ciudadanos, se desdibuja. Guadalupe Taddei, como presidenta del Instituto, ha mostrado desidia.
Ella buscó dos veces ser consejera del INE y solo por insaculación alcanzó el cargo. Y si bien nadie llega sabiendo todos los intríngulis, ni todo lo necesario para desempeñar tan importante función, se esperaba que pudiera mantener al órgano electoral lejos de los cuestionamientos. No lo ha logrado.
Primero, sin poder nombrar, por falta de acuerdos y consensos, al secretario técnico del INE, no le quedó más que designar a un encargado de despacho. Después, hace 10 días, vinieron las fallas en el sistema de registro de tiempos en el primer debate presidencial; luego la obstinación del Instituto con un formato de debates que a todos los participantes dejó inconformes.
¿Obcecación dolosa? Si no es eso, debería de ofrecerse una explicación pública del porqué de la reticencia al cambio.
Ahora, para promover la equidad en las elecciones, el INE utiliza siluetas… Y mismo en eso hace distinciones en el trato que se le da a la figura de Claudia Sheinbaum y de Jorge Álvarez Máynez con respecto a la de Xóchitl Gálvez. Necesaria la pregunta: ¿qué hubiera hecho Andrés Manuel hace seis años ante este injusto juego del Instituto, de las propagandas electorales y de las siluetas?
Pero el INE continúa mostrando su falta de compromiso hacia sus obligaciones, ahora poniendo en vilo el derecho a ejercer su voto de cuatro decenas de miles de mexicanos que viven en el extranjero. El órgano señala inconsistencias luego de que días antes había aprobado las solicitudes. Dar lugar a la posibilidad de dejar sin votar a ciudadanos mexicanos que residen en el extranjero va más allá de una simple cuestión procedimental; se presta al atropello y genera muchas suspicacias.
Más de 220 mil mexicanos se registraron para votar en el extranjero, de ellos, casi un 20% fueron notificados que no podrán votar de no aclarar inconsistencias. ¿Por qué la negativa?
Y si bien el INE ya habilitó un portal para que quienes fueron excluidos puedan reinscribirse antes del 5 de mayo, no ha dado explicación específica, individualizada y pormenorizada de la negativa inicial a cada uno de los solicitantes rechazados. Autoridades hablan de “irregularidades” (así en plural), de “patrones atípicos en los registros” y de eliminar cualquier sospecha que ponga en peligro “la integridad de la lista nominal”.
El INE debe dar cuenta de las razones de su proceder. No hay justificación que valga; el órgano tiene vasta experiencia en elecciones federales y debe ofrecer certeza en el voto a los mexicanos en el extranjero. Es su obligación cumplir con una de sus encomiendas esenciales: velar por el voto de cada uno de los mexicanos con derecho a votar, se encuentren dentro o fuera de territorio nacional.
La credibilidad del INE está en juego; el derecho de miles de mexicanos, también. Las explicaciones que ha dado el Instituto NO han sido ni suficientes ni adecuadas, y el tiempo apremia.
Tres en Raya
- López Obrador insiste en aparecer en la boleta electoral. Exige al INE —lo que para nada es justificable— ‘jugar limpio’ en el segundo debate presidencial. Lo mañoso no se le quita al señor presidente; quien no ha jugado limpio, no ha sido imparcial y no se ha sustraído del quehacer proselitista en favor del oficialismo es él.
- En esa misma arenga declarativa de la mañanera del día de ayer vuelve a atacar al comentarista y conductor Manuel López San Martín, quien fungió como moderador en el primer debate presidencial de estas elecciones del 2024. El mandatario habla ridículamente; para todos los mexicanos fue más que evidente el profesionalismo con el que se condujo —y se ha conducido— López San Martín.
- Nada tiene que hacer Alicia Bárcena (la Secretaría de Relaciones Exteriores) ni Luisa María Alcalde (la Secretaría de Gobernación) atendiendo el problema de registros de mexicanos en el extranjero. Pero, ya sabemos: el propósito de Andrés Manuel es minar al INE y hacerse él, el obradorismo y Morena de la organización de las elecciones…
POR VERÓNICA MALO GUZMÁN
COLABORADORA
EEZ