Fue priista. Despachó como titular del DIF municipal y comandó los centros vacacionales de Trinidad y Malintzi del IMSS.
Fue dos veces diputada local tricolor, coordinó inclusive su bancada. Se convirtió en alcaldesa de Tlaxcala (capital) y compitió para la gubernatura. Le ganó la partida Mariano González Zarur.
En 20212 buscó ser senadora, pero su partido la abandonó. Ante la injusticia, renunció al PRI y se afilió al PRD. El Sol Azteca la postuló y ganó las elecciones federales.
En 2016 insistió en su búsqueda por la gubernatura. Ella fue postulada por la izquierda, pero la derrotó el priista Marco Antonio Mena. La terrible administración de Mena la encumbró en la política estatal.
En 2018 se hizo diputada federal, pero rápidamente se convirtió en la “súper delegada”, y era vista como la representante de AMLO en Tlaxcala.
El 28 de octubre de 2020 renunció al cargo para buscar la candidatura de la coalición Juntos Haremos Historia a la gubernatura. Resultó electa gobernadora y tomó posesión el 31 de agosto de 2021.
Cuando iniciaron su recorrido por el país las corcholatas, ella abiertamente se la jugó con Adán Augusto López, pero ya resolvió cualquier conflicto con Sheinbaum. Es más, el apoyo se nota en el territorio tlaxcalteca, y puede ser una de las entidades con más votos proporcionales en favor de la candidata de la 4T.
Lorena Cuéllar controla la entidad y se lo demostrará con votos a su candidata. Pero de unos meses para acá ha tenido una “piedrita en su zapato”: el dirigente de Morena, Carlos Augusto Pérez Hernández.
El guinda local no está haciendo su trabajo y le apuesta a dejarla mal parada con los resultados del 2 de junio a la gobernadora. Su afición por la comidas, con largas sobremesas, ya trascendieron hasta en lo penal, ya que el dirigente de Morena atropelló a una persona en estado de ebriedad.
Mario Delgado tiene un doble trabajo: darle el avión al impresentable de Carlos Augusto Pérez, y coordinar, sin violar las leyes electorales, con la gobernadora y el secretario de Gobierno, Antonio Ramírez Hernández.
Un estado muy morenista, donde ganará Sheinbaum, con un dirigente que rema en contra, que tendrá que ser “saltado”. Cosas de la política, aunque Tlaxcala, ya es de la 4T.
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COLOFÓN.
- Marcelo no agarró nada. Monreal, tiene Zacatecas, e impuso candidatos en Chiapas y Puebla. Además, en la alcaldía de Cuauhtémoc.
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- Donde seguramente habrá alternancia será en Morelos; la pésima administración de Cuauhtémoc Blanco, cada día le da más oportunidades a Lucy Meza.
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- La seguridad de las candidatas es fundamental para todos los mexicanos. ¿Se acuerda de lo que pasó hace 30 años y cómo nos fue?
POR GUSTAVO RENTERÍA
COLABORADOR
@GUSTAVORENTERIA
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