COLUMNA INVITADA

Una nueva oportunidad

Después del interés que despierta la contienda por la Presidencia de la República, esta la batalla por gobernar la Ciudad de México, estamos hablando del segundo cargo público más importante de nuestro país

OPINIÓN

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Héctor Serrano / Colaborador / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Después del interés que despierta la contienda por la Presidencia de la República, esta la batalla por gobernar la Ciudad de México, estamos hablando del segundo cargo público más importante de nuestro país. La capital es el corazón político y económico de nuestra nación, es donde residen los poderes federales y se asienta la inmensa mayoría de la estructura administrativa del poder ejecutivo, su importancia en la vida de todos los mexicanos es innegable. 

Han pasado 28 años desde que en la Ciudad de México podemos elegir libremente a nuestros gobernantes, es la primer entidad federativa gobernada por la izquierda, que lo ha hecho de forma ininterrumpida desde 1997. A partir de entonces, la ciudad se convirtió en el escaparate perfecto para las más altas aspiraciones políticas; de los 5 Jefes de Gobierno que hemos tenido, todos han querido convertirse en presidentes de la República. 

Por eso la importancia de la Ciudad, además de ser una de las entidades federativas con mayor número de electores y de recursos económicos, es la caja de resonancia que convierte a los Jefes de Gobierno en candidatos naturales a las presidencia. Aunque hasta el momento solo uno lo ha logrado, las cosas pueden cambiar con la candidatura de Claudia Sheimbaum, es muy probable que se convierta en presidenta y en el segundo jefe de gobierno en lograrlo.

La Ciudad tiene un significado muy especial para morena, es aquí donde se consolidó el proyecto político de la 4ta transformación, su primer gran victoria electoral, fue cuando en 2015 lograron arrebatarle al PRD la mitad de la ciudad, lo demás, es historia. Por eso, solo por debajo de su interés por conservar la Presidencia, está el de mantener la Ciudad bajo su dominio, pues saben que de no ser así, puede empezar a allanarse el camino para futuros descalabros electorales. 

Pero ahora las cosas lucen distintas para morena, no es el mismo escenario de 2018 cuando lograron arrasar en la Ciudad, en 2021 la oposición logró ganarles la mitad de los cargos públicos en disputa y con ello rompió su hegemonía política. Aunque muchas encuestas sigan hablando de una amplia ventaja de la candidata oficialista, la contienda está más cerrada, podría decirse que el ganador está en el aire; todo dependerá de la cantidad de errores que cometan durante los siguientes meses de campaña.

Al igual que a nivel nacional, la verdadera disputa solo es entre dos candidatos; la oficialista y el opositor, movimiento ciudadano jugará voluntaria o involuntariamente, el papel de comparsa de alguna de las partes. Es alarmante que la campaña en la Ciudad ha ido subiendo de tono a un ritmo acelerado, existen acusaciones cruzadas de uso de recursos públicos e incluso de violencia, por el bien de la ciudadanía, es fundamental que las autoridades garanticen su imparcialidad en este proceso electoral.

La contienda se percibe tan cerrada, que en su desesperación, algunos promotores e “influencers” de la 4t están tratando de estigmatizar al candidato opositor Santiago Taboada mediante el uso de calificativos como “güerito” y “fresa”. Parece que no han aprendido la lección, los capitalinos queremos una ciudad donde quepamos todos, donde no exista división por nuestras preferencias ni por nuestro color de piel, donde los gobernantes sean juzgados por su capacidad y no por su origen.

A mi parecer es una estrategia equivocada con la que puede salirles el tiro por la culata, a esto me refería cuando hablo de cometer errores; la descalificación de nuestra identidad personal, nunca puede ser utilizada como una denostación.

En pocos meses se sabrá al ganador de la Jefatura de Gobierno y nuevos aires correrán en la Ciudad, los capitalinos tendremos una vez más la oportunidad de ratificar nuestra convicción democrática, no podemos dejar de aprovechar nuestra oportunidad.

POR HÉCTOR SERRANO AZAMAR

COLABORADOR

@HSERRANOAZAMAR

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