Gengis Khan (1206- 1227) líder de los ejércitos mongoleses logró establecer el mayor imperio terrestre del que se tenga memoria, que abarcó desde el Pacífico hasta la Europa Oriental para alcanzar un territorio de aproximadamente 33,000.000 de kms2, con una población de más de 100 millones de habitantes.
Fué por mucho un imperio mayor al romano y al macedonio de Alejandro Magno en sus épocas de apogeo.
Gengis Khan alcanzó la grandeza gracias a su gran carisma, la formación de un ejército bravío y muy bien estructurado, el empleo sistemático del terror para conquistar y dominar naciones enteras y sus grandes dotes para la administración de los territorios conquistados.
Gengis Khan es considerado como uno de los más grandes estrategas de la historia. Su inesperada muerte, aún relativamente joven, llevó a que sus hijos se dividieran el imperio y socavaran su poderío.
Durante la dinastía Qing (1644-1912) China se apoderó de las regiones tibetanas, mongolas, birmanas y otras.
La minimizada región mongola fue dividida en Mongolia del Norte, predecesora de la actual Mongolia, y la denominada Mongolia del Sur, hoy conocida como la región autónoma de “Mongolia Interior” de la República Popular China.
Mongolia del Norte aprovechó la Revolución china de 1911 para también iniciar un proceso revolucionario con el apoyo de la Rusia zarista, y, posteriormente, de la Rusia bolchevique.
Se independizó de la dinastía Qing y se constituyó en 1924 como la República Popular de Mongolia- RPM-, que por más de setenta años gravitó como país comunista bajo la extinta Unión Soviética, hasta su disolución de 1991, cuando se declaró independiente como la República de Mongolia, un país democrático multipartidista.
A diferencia del imperio de Gengis Khan, la Mongolia actual tiene una superficie de 1.6 millones de Kms2- número 19 a nivel mundial-, y es el país menos densamente poblado del orbe. Mongolia está dominada al norte y oeste por estepas y montañas y al sur por el desierto del Gobi. De sus 3.4 millones de habitantes alrededor de un 30 por ciento son nómadas, con una esperanza de vida de las más bajas del mundo.
El nivel general de ingresos de su población también es muy bajo, además de presentar un alto índice de concentración del ingreso y altos niveles de corrupción.
Después de décadas de dominio comunista, Mongolia transitó hacia una economía de mercado, lo que ha favorecido un crecimiento significativo basado principalmente en la explotación de carbón y cobre.
Más de 86% de sus exportaciones, principalmente carbón, van a China.
Para buscar una relación equilibrada con sus dos poderosos vecinos y asegurar su independencia, Mongolia ha buscado vincularse con países ajenos a la órbita sino-rusa como Japón, Corea, Canadá, los EE. UU., la Unión Europea y Australia, lo que le ha redituado en un mayor flujo de comercio y de inversiones para el desarrollo de vías de comunicación y otras obras de infraestructura.
POR AGUSTÍN GARCÍA VILLA
ANALISTA POLÍTICO
EEZ