Podría decirse que 2024 es el mayor experimento político de la historia de la humanidad con más de cuatro mil millones de personas acudiendo a las urnas en más de 70 países. Este año mostrará lo que funciona y no funciona para los votantes. Pero no es un tema nuevo para nosotros, el monitoreo sobre temas sociales que realiza Ipsos desde hace muchos años, permite analizar y entender la evolución del pensamiento colectivo (y los movimientos sociales y políticos que genera), desde su gestación hasta su desaparición si es el caso.
En el contexto político actual, hay un creciente sentimiento de descontento que se extiende a nivel mundial. Este descontento, alimentado por la creciente desigualdad socioeconómica y la percepción de una desconexión entre las élites y la población general, ha dado lugar al resurgimiento del populismo.
El populismo se define como una estrategia política que explota los sentimientos antiélite y antisistema. En 2024, el 63% de las personas en el mundo sienten que su país necesita un líder fuerte para recuperar el país de los ricos y poderosos. Esto, en muchos aspectos, es la esencia del populismo: la creencia de que el poder debe volver a las manos del pueblo.
Sin embargo, el populismo contemporáneo va más allá de simplemente desafiar a las élites y al sistema establecido. También se percibe una fuerte corriente antiinmigración. En países de alta captación migratoria como Turquía e India, existe un fuerte sentimiento antinmigrante donde casi 8 de cada 10 personas considera que su país sería mas fuerte si se detuviera la inmigración.
En México, ante la masiva llegada de inmigrantes en los últimos años, este sentimiento se ha duplicado, pasando del 19% al 41% en 2023. Una radicalización en el sentimiento nacionalista y antiinmigración puede ser la antesala a sistemas políticos mas radicales y este 2024 la voz mundial se hará escuchar claramente en las urnas.
Hoy el 58% de las personas en el mundo siente que su país está en declive, y el 57% cree que la sociedad de su país está rota, alimentando así el sentimiento populista. Pese al sentimiento antisistema, la mayoría de las personas no se oponen a un gobierno grande y activo.
De hecho, el 75% de los encuestados apoyan el gasto público en atención médica y el 67% apoya el gasto en la reducción de la pobreza y la desigualdad social. La sociedad quiere un gobierno diferente, no un gobierno pequeño.
Centrándonos en México, la tendencia hacia las políticas antisistema es evidente. Claudia Sheinbaum es la favorita para ganar las elecciones de 2024. Sin embargo, otros factores, como la economía, la seguridad y la corrupción, también juegan un papel crucial. Esta tendencia hacia el populismo en México refleja una desilusión más amplia con el status quo y una pérdida de fe en los sistemas políticos.
A nivel mundial, 2024 se perfila como un año de grandes cambios políticos. Si bien el auge del populismo en sí mismo no es necesariamente negativo, es importante que se canalice de manera constructiva para abordar las profundas desigualdades y descontentos que lo alimentan.
Como sociedad, debemos estar atentos a estos desarrollos y esforzarnos por construir un mundo más equitativo y justo en el que el poder esté realmente en manos del pueblo.
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https://www.ipsos.com/es-mx/el-populismo-sigue-fuerte
POR FERNANDO ÁLVAREZ
Senior Group Director Ipsos en México
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