COLUMNA INVITADA

La paz, ¿un lujo en nuestros días?

Sin duda estamos en el arranque de uno de los años más volátiles de la historia del mundo entero

OPINIÓN

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Monica Castelazo / Columna invitada / El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

Sin duda estamos en el arranque de uno de los años más volátiles de la historia del mundo entero. En medio del conflicto bélico aparentemente sin fin en Europa y Asia; un abierto ataque entre el crimen organizado y los gobiernos; más los ejercicios democráticos en preparación ocurriendo para elegir a quienes nos representarán en los gobiernos futuros de varios países del mundo.

Esto en medio del avance inminente de la tecnología, las inteligencias artificiales amenazantes con quitarnos el trabajo mientras parecen ayudarnos a hacerlo más rápido y mejor; la implementación de modelos comerciales robóticos en venta al público general y el uso de dispositivos móviles en todo momento.

En el ámbito de la salud pública, las pandemias advertidas posibles de repetir; acompañadas del boom de los autos eléctricos buscando suplantar a los tradicionales de gasolina; cuestionamientos filosóficos relacionados con las distintas ideologías más populares; los movimientos sociales que buscan reivindicar el rol de los animales dentro de una visión antropocentrista que ha dominado los últimos siglos, y que ha llegado aparentemente a su culminación con la aglomeración de personas en las ciudades; la decadencia de los valores familiares y la decisión de muchas personas adultas de dedicarse a la vida en solitario, incluso sin trabajar, dado que la pirámide económica ha llegado a un momento en el que por más que trabajes, no te alcanzará para sostener un nivel de vida preferente solo, así que mejor dejar que te mantenga el gobierno.

Sin duda, un momento de convulsión con la amenaza de ataques nucleares, banalidad en la moda y la música popular; gente haciéndose más rica y otros más pobres.Y dentro de todo este caos, yo me pregunto, ¿cómo se encuentra la paz? 

En principio la paz no es algo que se busque, pues se vuelve un momento efímero si depende de experiencias externas que nos dan placer, entender que la paz no es solo el abrazo del ser amado; la comida sabrosa o la bebida refrescante; ni nuestra mascota moviendo la cola o la flor tomada de un jardín; o las risas provenientes de una charla con un gran amigo, sino ese estado mental inamovible, que a pesar del caos externo permanece, eso que no sabemos de dónde viene y nos permite en los momentos más duros, tomar decisiones en pro del bien propio y común, una confianza desapegada del proceso y del resultado.

Es la comunicación interna más importante que debería estar basada en la congruencia, para que el mensaje externo no nos afecte. Esto, considero, será nuestra gran lección por aprender este año, alcanzar la verdadera salud mental y la templanza, sin importar lo caótico que sea el exterior.

Mónica Castelazo, es Gerente Sr. Comunicación y Asuntos Corporativos en Teva México.

X: @MonicaCastelazo

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